Page 223 - Orestiada. Agamenón. Las Coéforas. Las Euménides

AGAMENÓN

junto al pie de Ilio
cuando arribó el naval ejército.

Coro Antístrofa 1ª.
Por mis propios ojos estoy al tanto
de su regreso: yo soy mi propio testigo.
Mas sin la lira, entona el himno 990
de la Erinia, aprendido por sí mismo, desde el fondo
el corazón, sin tener toda
la querida valentía de la esperanza.
Y mis sentimientos no erran en vano: 995
junto a mi pensamiento justiciero
un corazón se agita dando vueltas que se consuman.
Ruego que, en contra
de mi esperanza, como mentiras caigan
y que no tengan cumplimiento. 1000

Coro Estrofa 2ª.
En verdad que la máxima salud
no sacia el límite, pues la enfermedad,
vecina del mismo muro, ahí se asienta.
Y camina recto el destino 1005
de un hombre hasta que choca con invisible escollo.
Y si antes una parte de sus bienes
adquiridos, dejando de lado el miedo,
con bien medido cálculo, 1010
no hunde entera la casa,
llena de excesiva carga,
ni se hunde la embarcación.

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