Page 295 - DERECHO INDÍGENA Y DERECHOS HUMANOS EN AMÉRICA LATINA (1988)
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riesgo más permanente: un camuflaje de la función de dominación económico-
                  política de la normatividad jurídica (que legisla por acción u omisión dentro de los
                  límites de la operatividad y el consenso social), presentando como acción de
                  protección a los derechos etno-lingüísticos de las poblaciones indígenas.

                         La actual opción de no-dependencia ha acentuado más aún las agudas
                  contradicciones que han desgarrado históricamente a la sociedad peruana y han
                  producido un complejo y desafiante fenómeno de insurgencia popular que está
                  cuestionando radicalmente, una vez más, a la sociedad global y a la ausencia de
                  un proyecto de liberación nacional y de justicia. En una de las regiones
                  tradicionalmente más empobrecidas y explotadas del país, donde la gran mayoría
                  de la población está constituida por campesinos indígenas quechuas, un
                  movimiento armado ha proclamado un camino de guerra popular prolongada del
                  campo a la ciudad para la conquista revolucionaria del poder. La capacidad de
                  convocatoria y movilización que el movimiento "Sendero Luminoso" está
                  demostrando para con ciertos estratos y subregiones étnicas del campesinado y
                  de la pequeña burguesía indígena empobrecida de la región andina es innegable y
                  merece ciertamente una reflexión política y cultural de  gran envergadura, de
                  compromiso y de urgencia. El movimiento permanece incomprendido por los
                  sectores criollos y urbanos del país, sobre todo en su violencia extrema, en su
                  carga justiciera secular, en su carácter milenarista y mesiánico, en su rechazo de
                  toda forma de alianza, compromiso y negociación, en su negación radical de todo
                  lo que representa una posible convivencia con el Perú urbano y de tradición
                  cultural europeizante. En este sentido el movimiento se vincula a la larga historia
                  de las sublevaciones populares indias del Perú y, en general, indígena en
                  América, que convocan a los estratos más oprimidos y explotados ofreciendo
                                                                                             41
                  alternativas de rechazo total de la sociedad del opresor y de su cultura .

                         A esta proposición de violencia armada y de postulados fundamentalistas el
                  gobierno ha dado una respuesta igualmente violenta cayendo en la espiral del
                  terrorismo de Estado y de la represión indiscriminada  y masiva. Un informe de
                  Amnistía Internacional (agosto de 1983) que señala numerosos casos de torturas,
                  desapariciones, ejecuciones extrajudiciales sumarias, ha sido rechazado por el
                  gobierno de F. Belaúnde Terry como insustanciado. Hoy, sin embargo, la misma
                  oficina gubernamental del Ministerio Público (Fiscalía de la Nación) está
                  procesando 600 casos de personas "desaparecidas" ocurridos en la región de
                  Ayacucho durante 1983. En el primer semestre de 1984 ha habido un promedio de
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                  50 denuncias semanales de personas desaparecidas en la misma región  que se
                  encuentra en estado de ocupación militar. Abogados, miembros del poder judicial,
                  de la Comisión Andina de Juristas y numerosos políticos, intelectuales y
                  organizaciones del país han expresado su profunda preocupación por el curso y el
                  estilo que está tomando la respuesta  del gobierno a la insurgencia armada,
                  especialmente por la subordinación y control que está sufriendo el poder judicial a
                  manos del ejército y de las fuerzas policiales, la restricción a la libertad y


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                    Cf Bonfil (1981), Kapsoli (1982), Rodriguez, Varese (1981), Wankar (1981).
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                    Peruvian Quarterly Report. abril de 1984.


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