Page 13 - El Islam cristianizado : estudio del "sufismo" a través de las obras de Abenarabi de Murcia
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El sufismo, imitación cristiana  9
       hecho es la confesión más evidente de que no les bastaba a los mu-
       sulmanes  el  texto  del Alcorán para construir su doctrina ascético-
       mística, y que se veían forzados a vivificar su  letra muerta con  el
       espíritu de los ejemplos cristianos.

          3.  Por eso, yo he sostenido desde hace años otra hipótesis que
       explique mejor la causa de aquellas analogías (1). Esta hipótesis es
       la de la imitación, más o menos consciente, de la doctrina y método
       de vida del monacato cristiano oriental. Su comprobación no es difí-
       cil. Primero, es innegable  la posibilidad de contacto entre  el islam
       primitivo y el modelo monástico cristiano:  el ráhib o monje es ya un
       tópico de la literatura preislámica y de  la literatura ascética de los
       primeros siglos del islam. La Arabia estaba llena de cenobios cristia-
       nos;  el beduino, en sus viajes, tropezaba a cada paso con anacoretas
       en la Siria y en Egipto (2). Después, las doctrinas y métodos de vida
       espiritual  de  los  ascéticos  cristianos,  singularmente  los  conteni-
       dos en  los Verba Seniorum y en  las  Vitae Patrum Eremi, reapa-
       recen en los escritos y ejemplos de los ascetas y místicos musulma-
       nes (3). El Ihia de Algazel, suma del sufismo, está lleno de estos
       préstamos, confesados unas veces y tácitos otras.  E! caudal mayor
       de los confesados  lo constituyen los textos atribuidos a Jesús y  los
       bíblicos puestos en boca de musulmanes  (4). Los tácitos son toda
       o casi toda la doctrina ascéticomística del Ihia (5), que es de ori-
         (1)  Cfr. Asín, Abenmasarra y su escuela (Madrid, 1914), pág. 12-16.
         (2)  Es muy sugestivo, para la posibilidad del contacto,  el mapa corográ-
       fico de los centros monásticos de la Arabia, Siria y Egipto, que se inserta por
       Rosweyde en sus Vitae Patrum (Lugduni, 1617) y que reproducimos en la pá-
       gina siguiente.
         (3)  Sería del más alto interés reunir los textos narrativos que en gran nú-
       mero aparecen en los libros ascéticos árabes  y cuyos protagonistas son mon-
       jes cristianos (ráhib) o israelitas (banu lsrail). Muchos de esos textos repro-
       ducen en el fondo y a veces a la letra textos de las Vitae Patrum, como demos-
       traré en otra ocasión.
         (4)  Cfr. supra, pág.  8.
         (5)  Cfr. Asín, La mystique á" Al-Gazzáll ("Mélanges de la Faculté orién-
       tale", Beyrouth, 1914).
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