Page 259 - El Islam cristianizado : estudio del "sufismo" a través de las obras de Abenarabi de Murcia
P. 259

248       Parte  II. — Doctrina espiritual de Abenarabi
        certantes paradojas, que traducen su anhelo de morir, para encontrar
        en la muerte su vida que es el Amado (1). Alhalach, el poeta místico
        de Bagdad, cifraba este delicado pensamiento en brevísima estrofa,
        que Abenarabi aduce y que evoca el recuerdo del estribillo teresiano
        "que muero porque no muero":

                      "¡Amigos míos, matadme;
                     que en mi muerte está mi vida!"
          Asimismo el tema del famoso soneto que comienza "no me mueve
        mi Dios para quererte", cuya paternidad ha sido tan discutida, fué
        tópico también vulgar entre los poetas místicos del islam, cuyos prin-
        cipales testimonios aporta Abenarabi para dilucidar este  sutil punto
        del amor desinteresado y platónico (2).
           La filiación cristiana del tema es palmaria: Clemente de Alejandría,
        en sus Stromata (3) cifraba la perfección mística en servir a Dios, no
        por temor del castigo ni por esperanza del premio, sino por puro amor
        exento de  interés.  San  Basilio, más  tarde,  hacía  de  los  devotos
        una clasificación tripartita, basada en esos tres estímulos: el miedo del
        castigo caracteriza a  los siervos;  la esperanza de  la recompensa, a
        los mercenarios; el puro amor de Dios, a los hijos (4). Casiano, en sus
        Collationes vulgarizará luego en el monacato occidental estos tres mis-
        mos grados de la ascensión del alma hacia la caridad perfecta (5). Y
         San Agustín pondrá igualmente en ese amor gratuito y casto, que no
         busca a Dios más que por su bondad intrínseca, la meta de la perfec-
         ción, aunque sin excluir ni condenar como pecado la perspectiva de la
         recompensa  celestial, cual  lo hicieron los gnósticos cristianos de  la
         escuela catequística de Alejandría y los quietistas del siglo xvn (6).

           (1)  Totifa, 4-6.
           (2)  Fotuhat,  II,  458,  474.
           (3)  Cfr.  edic. Lugd.  Batav.,  1616; tomo  IV,  361.
           (4)  Cfr.  Sti.  Basilii Regulae fusius  tractaiae, "Sermo de  renuntiatione"
         (PP. GG., XXXI, 896).
           (5)  Cfr. Cassiani, Coüatio, XI, 6-9.
           (6)  Cfr. Pourrat, op.  cit.,  I, 298-300.
   254   255   256   257   258   259   260   261   262   263   264