Page 151 - La sangre manda
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localizado a algunos alumnos y a dos profesores, y hay cerca de una docena
en estado crítico. Es peor que lo de Parkland. ¿Te ha recordado a Brady
Hartsfield?
—Claro.
—Ya, a mí también. A la gente que se llevó por delante en el Centro
Cívico y la que podría haberse cargado esa noche en el concierto de Round
Here si hubiésemos tardado unos minutos más. Procuro no pensar en eso,
decirme que esa vez ganamos, porque cuando me viene a la cabeza me entra
el yuyu.
Holly lo sabe todo sobre el yuyu. Lo siente a menudo.
Jerome se frota lentamente una mejilla con la mano y, en el silencio, ella
oye el roce de sus dedos contra el nuevo asomo de vello del día.
—En Harvard, cuando estaba en segundo, hice una asignatura de filosofía.
¿Te lo había comentado?
Holly niega con la cabeza.
—Se llamaba… —Jerome traza unas comillas con los dedos—. «El
problema del mal». Hablamos mucho sobre los conceptos del mal interno y
del mal externo. Nosotros… Holly, ¿te encuentras bien?
—Sí —responde ella, y así es…, pero, al oír mencionar el mal externo, su
mente ha vuelto de inmediato al monstruo al que Ralph y ella siguieron hasta
su guarida en aquella cueva de Texas. El monstruo había adoptado muchos
nombres y muchos rostros, pero ella siempre había pensado en él como el
«visitante» sin más, y el visitante era malvado donde los hubiera. Nunca le ha
contado a Jerome lo que ocurrió en la cueva conocida como el Agujero de
Marysville, aunque supone que él sabe que en Texas sucedió algo
espantoso… Mucho más de lo que publicaron los periódicos.
Jerome la mira con gesto vacilante.
—Sigue —pide ella—. Me parece muy interesante. —Es la verdad.
—En fin… en clase hubo consenso en que el mal externo ha de existir si
uno cree en el bien externo…
—En Dios —dice Holly.
—Sí. Siendo así, uno puede creer que los demonios existen, y el
exorcismo es una respuesta válida a ellos, que de verdad existen los espíritus
malignos…
—Los fantasmas —dice Holly.
—Exacto. Por no hablar de las maldiciones que surten efecto, y las brujas,
y los dybbuks, y a saber qué más. Pero en la universidad todas esas cosas
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