Page 184 - MITOS GRIEGOS e historiografía antigua
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ellos por el sentido historiográfico de «historia universal» dentro de los
presupuesto helenísticos, y del expansionismo imperial, aunque con
más preocupación por épocas, ámbitos o etnias (judíos en el caso de
Josefo).
Si subyace alguna lección moral en la historiografía polibiana, ésta
es el valor de la historia como medio de prevenir desgracias (políticas,
guerras) en el futuro, en fin, el conocido lema de historia magistra
vitae, que Polibio expresa en estos términos:
Si los autores que me han precedido hubieran omitido el elogio de la histo
ria en sí, sin duda sería necesario que yo urgiera a todos la elección y transmi
sión de tratados de este tipo, ya que para los hombres no existe enseñanza más
clara que el conocimiento de los hechos pasados. Prácticamente todos los
autores aseguran que del aprendizaje de la historia resultan la formación y la
preparación para una actividad política, afirman también que la rememoración
de las peripecias ajenas es la más clarividente y la única maestra67 que os
capacita para soportar con entereza los cambios de la Fortuna (1,1-2).
Por descontado: estos temas se entenderán mejor, en su mayor parte, por
medio de esta obra mía, la cual hará ver también más claramente, por su pro
pia naturaleza, hasta qué punto las características de la historia política ayudan
a los estudiosos (1,2,8).
A diferencia de Heródoto o Tucídides, Polibio expone claramente
su pensamiento historiográfico. Es el único de los grandes historiado
res antiguos que sólo pretende ser eso, un historiador y no un literato o
un buen escritor. La historia la representa como una ciencia, pero no
como un cúmulo de conocimientos cerrados, a la manera tucididea,
sino como hechos y conocimientos en continua ampliación e
interrelación. A Polibio tampoco le interesa el gran público: es un na
rrador político, y no se entretiene en contar detalles nimios o chismes
de salón. Polibio desprecia las «historias monográficas locales»:
Añado todavía que los que quieren tratar monográficamente acerca de
ciudades o de regiones, pero no poseen la experiencia mencionada, sufrirían
algo semejante: omitirán muchas cosas dignas de mención y tratarán
prolijamente de otras insignificantes. Eso ocurre por no haber visitado las
regiones (XII, 25 g.3).
67 R. Lansfester, Historia Magistra Vitae, Genève 1972.