Page 89 - Cómo hacer que te pasen cosas buenas: Entiende tu cerebro, gestiona tus emociones, mejora tu vida (Spanish Edition)
P. 89

encuentra  encerrado  en  un  circuito  tóxico  que  en  cualquier  momento  se
                 puede volver a romper.
                    Por otra parte, le añado pautas para evitar la crisis dentro del avión. Antes
                 de subir, ha de tratar de relajarse mediante una serie de mensajes cognitivos
                 positivos y técnicas de respiración. Además, debe llevar una medicación de
                 rescate consigo, cuyo efecto es casi inmediato y actúa en poco tiempo, por
                 si empezara a sufrir el ataque.



                 Muchas  personas  solo  con  tener  la  seguridad  de  llevar  en  el  bolsillo  esa  medicación
              logran  sobreponerse  al  ataque  de  pánico  sin  necesidad  de  tomársela,  ya  que  van
              postergando la toma en la convicción de que en última instancia la pastilla les ayudará a
              superarlo,  lo  que  consigue  que  finalmente  puedan  llegar  a  controlar  esos  ataques  sin
              auxilio  de  fármacos.  Le  receto  una  medicación  adicional  para  que  poco  a  poco  vaya
              desbloqueando la tensión acumulada en su cerebro.
                 En  psicoterapia  trabajo  de  forma  profunda  el  origen  de  su  nivel  de  ansiedad:  se
              encuentra  siempre  alerta,  sin  tiempo  para  la  relajación.  No  se  permite  un  fallo,  no
              descansa, come mal, lo que ha provocado que su cerebro se colapse y le frene a través
              de una crisis de pánico. Un ataque de pánico es lo que yo denomino a veces la «fiebre de
              la mente». Es decir, del mismo modo que la fiebre es un indicador de que hay algo que
              no funciona bien en el cuerpo, las crisis de ansiedad o de pánico te avisan de que algo en
              tu mente no es correcto, conduciéndote en última instancia al colapso. En terapia enseño
              a Gustavo a relajarse, a tomarse las cosas con más calma, a saber renunciar, a hacer ver
              a su jefe que necesita apoyo en sus tareas, a delegar parte de sus responsabilidades. Todo
              con tal de aligerar una carga excesiva de trabajo.
                 Poco a poco, Gustavo empieza a sentirse mejor. Al principio persiste el miedo a volar,
              pero  no  insisto  porque  eso  es  accesorio,  posponemos  ese  objetivo  hasta  que  se  vaya
              encontrando mejor. Con el tiempo, empieza a realizar vuelos cortos, de hora u hora y
              media aproximadamente, para los que se prepara mediante mensajes cognitivos positivos,
              el saber que lleva consigo medicación de rescate y técnicas de relajación y control de la
              respiración.  Mediante  estas  técnicas,  y  la  seguridad  que  le  aporta  llevar  consigo  la
              medicación  de  rescate,  que  solo  ha  necesitado  tomar  en  dos  ocasiones  en  un  año  de
              tratamiento,  Gustavo  va  encontrándose  mucho  mejor  y  ya  se  sube  a  aviones  sin
              excesivas complicaciones y su cuerpo poco a poco va recuperando la calma.






                 Si una persona vive constantemente alerta, genera una interpretación de la
                 realidad peor de lo que es. Responde ante lo que le sucede en su interior
                 como si fueran amenazas reales. El cerebro se confunde al responder.








                                                             89
   84   85   86   87   88   89   90   91   92   93   94