Page 509 - El Señor de los Anillos
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de  oíros,  os  habría  aplastado  en  seguida,  pues  os  habría  tomado  por  pequeños
      orcos, descubriendo tarde mi error. Muy raros sois en verdad. ¡Raíces y brotes,
      muy raros!
        Pippin, aunque todavía muy asombrado, perdió el miedo. Sentía ante aquellos
      ojos una curiosa incertidumbre, pero ningún temor.
        —Por  favor  —dijo—,  ¿quién  eres?  ¿Y  qué  eres?  Una  mirada  rara  asomó
      entonces a los viejos ojos, una suerte de cautela; los pozos profundos estaban de
      nuevo cubiertos.
        —Hrm, bueno —respondió la voz—. En fin, soy un Ent, o así me llaman. Sí,
      Ent es la palabra. Soy el Ent, podríais decir, en vuestro lenguaje. Algunos me
      llaman Fangorn, otros Bárbol. Podéis llamarme Bárbol.
        —¿Un Ent? —dijo Merry—. ¿Qué es eso? ¿Pero qué nombre te das? ¿Cómo te
      llamas en verdad?
        —¡Hu, veamos! —respondió Bárbol—. ¡Hu! ¡Eso sería decirlo todo! No tan
      de  prisa.  Soy  yo  quien  hace  las  preguntas.  Estáis  en  mi  país.  ¿Quiénes  sois
      vosotros, me pregunto? No alcanzo a reconoceros. No me parece que estéis en
      las  largas  listas  que  aprendí  cuando  era  joven.  Pero  eso  fue  hace  muchísimo
      tiempo y pueden haber hecho nuevas listas. ¡Veamos! ¡Veamos! ¿Cómo era?
       Aprended ahora la ciencia, de las criaturas vivientes:
       Nombrad primero los cuatro, los pueblos libres:
       los más antiguos, los hijos de los Elfos;
       el Enano que habita en moradas sombrías;
       el Ent, nacido de la tierra, viejo como los montes;
       el Hombre mortal, domador de caballos.
        » Hm, hm, hm.
       El castor que construye, el gamo que salta, el oso aficionado a la miel, el
         jabalí que lucha,
       el perro hambriento, la liebre temerosa…
        » Hm, hm.
       El águila en el aire, el buey en la pradera,
       el ciervo de corona de cuerno, el halcón el más rápido,
       el cisne el más blanco, la serpiente la más fría…
        » Hum, hm, hum, hm, ¿cómo seguía? Rum tum, rum tum, rumti tum tm. Era
      una larga lista. ¡Pero de todos modos parece que no encajaréis en ningún sitio!
        —Parece  que  siempre  nos  dejaron  fuera  de  las  viejas  listas  y  las  viejas
      historias —dijo Merry—. Sin embargo, andamos de un lado a otro desde hace
      bastante tiempo. Somos hobbits.
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