Page 75 - Microsoft Word - Gabriel Silva - Geometria sagrada de las piramides.docx

Cierto es que en algunas épocas la G.P. fue utilizada como Templo, por lo cual el mismo Herodoto, en una contradicción
con sus propios escritos sobre la construcción, comenta que Kheops fue odiado por su pueblo al usar -o al menos intentar
acondicionar- la Gran Pirámide como tumba para él mismo. Ello explicaría el posible saqueo ocurrido durante la VI
Dinastía, en la que se habría destruido todo lo hecho por Kheops, para que la pirámide volviera a servir del mismo modo
que antes.

Durante dos milenios la G.P. quedó vacía y sellada, hasta que Ramsés II la abrió y de su época data la única inscripción
exterior visible en jeroglíficos, que expresa que Mai, -superintendente de los trabajos de reparación- y Seanj-Pa, intendente
de trabajos del Templo de Amón, trabajaron allí en Gizéh para reparar las pirámides.
Es lamentable que la arqueología de más valor a los escritos contradictorios de un hombre como Herodoto (con el
histórico respeto que se le pueda tener por su simple fama), que a los miles de ingenieros, matemáticos, físicos y
constructores modernos, que no hacen cálculos "estimativos", sino lo más exacto posible de número de trabajadores, de
"horas/hombre", de pesos, medidas y plazos de obra, así como a la comprensión de las utilidades de una obra en sí
misma.

Reducir todo pasillo o túnel a "por ahí bajaban al muerto", y adjudicar a toda cámara o habitáculo el título de "cámara
funeraria", no es hoy un "error científico", sino lisa y llanamente estupidez, ceguera, desprecio olímpico a la ciencia y
ofensa para quienes pensamos, experimentamos y analizamos basándonos en todas las disciplinas. Disculpen los
Lectores mi insistencia en remarcar el contraste entre los pensantes "heterodoxos" y los no tan sapiens "ortodoxos", pero
no fuimos los heterodoxos quienes iniciamos la guerra de posiciones al modo de burla que usa la dictadura académica.
Desde los más recalcitrantes ortodoxos de la arqueología y egiptología oficial, hasta la mayor parte de sus simpatizantes,
he recibido -como todos mis colegas piramidólogos- los ingeniosos motes de "piramidiota", "piraminoico" y otros menos
transcribibles. Sin embargo somos los llamados "piramidiotas" quienes beneficiamos hoy en día nuestro organismo y salud
mental con las pirámides, aún en sus usos y construcciones más simples.

Desde épocas muy anteriores a la IV Dinastía, existen referencias por otras vías de información que los arqueólogos
siempre rehuyen estudiar y combinar para constatar. Por ejemplo, el hecho de que existen documentos cuneiformes
datados como del 5.700 a. de C., donde las grandes pirámides se mencionan como templos donde diversos grupos
nómades llegaban en peregrinación desde las tierras heladas y desde las más calientes. Incluso se menciona en dichas
tablas a los Esenios, que lejos de ser una tribu hebrea, son mucho más antiguos y tienen una historia ligada a las
Pirámides de Gizéh y otros monumentos en Europa, África y Asia. A propósito de ello, es tan bella como interesante esta
imagen de la Sagrada Família en Egipto. Se encuentra en una de las puertas de la Catedral de Florencia.

Además de no poder considerar como tumbas por ninguna razón de lógica
a las tres grandes pirámides de Gizéh y las dos de Dashur, sino como
producto de una tecnología evidentemente superior a todas las conocidas
incluyendo la nuestra, debemos ser objetivos con respecto a la finalidad de
las otras ciento nueve pirámides existentes en Egipto. ¿Cuántas momias
completas se han encontrado en esas otras pirámides? La respuesta
demoledora es que ¡sólo una!... La de Merenra, aunque no hay ningún indicio
válido de que el sujeto sea el supuesto Merenra o que él haya ordenado la
construcción de la pirámide. Seis trozos de momias han sido encontrados en
pirámides menores y en la de Mentuhotep II se hallaron dos momias de
mujeres.
Ni siquiera ajuar funerario en ninguna y sólo en tres ocasiones más se han encontrado algunos restos humanos
(vísceras) en vasijas que pudieron haber sido colocadas allí en cualquier época, así como algunos huesos sueltos que no
pudieron pertenecer a faraón ni noble alguno y bien pudieron llevar allí los perros y otros cánidos de la zona, que usaron
las construcciones como madrigueras durante siglos. Las aberraciones deductivas de la mayor parte de los hallazgos de
estatuillas, equivale a adjudicar la construcción del Castillo de Santa Bárbara a los chavales que pintan graffitis en sus
paredes o tiran cajetillas vacías de cigarros entre los arbustos, o al Papa, por encontrarse allí una imagen suya. Cuando
menos, equivale a adjudicar los castillos de Europa a los Alcaldes actuales, que hacen colocar libros de registros, ajuar,
mobiliario y pasamanería.

LA SAGRADA CIENCIA PIRAMIDAL

Si los antiguos las usaron como productoras de energías de diverso tipo, como partes fundamentales de la extracción y
procesado de la electricidad, ello ha sido porque sabían lo que ocurre en la pirámide en todos los aspectos de la energía.
Sabían que es capaz de activar un circuito electrónico a partir del campo magnético que produce, si se la integra
adecuadamente en él; sabían que sirve para evitar pérdidas energéticas mediante el reciclado de la misma energía en los
condensadores; así que no podían haber llegado a esos diseños sin conocer en profundamente la física integral de la
pirámide.