Page 167 - Resiliente
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Llegamos a la reja principal, y vimos que Mauro estaba allí
en el asiento de la camioneta a la cual hecho para atrás
en retroceso, Máximo brinco y la abrió y yo pude ingresar
pasándole a un lado a Mauro, los primeros zombis aparecieron
en el campo de visión y vi que Mauro acelero la camioneta
contra ellos atropellando a uno que se había metido en la
urbanización. Máximo tranco la reja y Mauro coloco de nuevo
la camioneta bloqueándoles el paso, vimos al grupo de unos
quince zombis metiendo las manos entre los tubos intentando
empujar inútilmente, gritando y gimiendo.
—Mierda. —dijo Máximo sentándose frente a la reja —Joder.
—Ya perderán el interés. —dije yo.
—Tenemos que resolver eso —dijo Mauro mirándome —pensé
que podíamos bloquear la calle completa, es bastante estrecha.
—Si —dije yo jadeando —he pensado lo mismo.
Volvimos a casa dejando los zombis en la reja, nos tardamos
con exactitud tres horas haciendo la búsqueda y en mi opinión,
una búsqueda infructuosa, discutimos la comida que habíamos
tomado, y terminamos calculando que nos extenderían unos cuatro
o cinco días más, angustiados Mauro, Máximo y yo nos quedamos
mirándonos mientras las chicas se iban de allí a vigilar al te-
cho (Habíamos quedado en noches anteriores en que las muchachas
contribuirían a la vigilancia desde el techo durante los días
para aliviarnos la tarea nocturna y que Mauro en tanto pudiera
permanecer se incorporaría a las pesquisas nocturnas).
—Tres días o cuatro sin racionar —dijo Mauro con los dedos
cruzados sobre la mesa —Máximo seis con racionamiento, agua...
bueno podemos disponer del agua del rio si hacemos faenas para
allá... pero si, ya es obvio que no vamos a resistir si no
tomamos este tema en serio y a gran escala ¿Entonces?
—Bueno amigo mío —dijo Máximo mirando a Mauro —lamento
informarte que, aun yo siendo médico, dudo que tú te compongas
en cuatro días así que... nos toca Mario, vamos a tener que ir
a la ciudad a buscar mucha mas comida.
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