Page 180 - Resiliente
P. 180

—Sera mejor que nos vayamos —dijo mirando su reloj de pul-

                                    sera —vamonos...
                                            —Espera —dije —aquí hay una farmacia dentro del hipermer-

                                    cado, en el segundo piso...
                                            —No me jodas Mario...

                                            —Ya estamos aquí —dije mirándole —y la horda se ha aleja-
                                    do, mejor aprovechemos para reunir todo... además quizás hayan

                                    cosas útiles en la zona de ventas.
                                            —Marico por Dios...

                                            —Vamos Máximo...



                                    Subí las escalerillas que daban hasta la puertecilla principal
                                    y abrí con lentitud y todo el sigilo posible la puerta, un he-

                                    dor horrible, realmente indescriptible llego a mi nariz, abrí
                                    un poco más y mire que estaba en un congelador donde metían

                                    carne, me había metido en plena carnicería.



                                    Aparentemente los tanques de hidrógeno seguían enfriando por-
                                    que cuando camine con lentitud con el hacha en las manos, mire

                                    a un hombre tendido de espaldas totalmente tieso con los ojos
                                    abiertos y una pistola llena de escarcha, había un charco de

                                    sangre congelada alrededor de su cabeza, el pobre se había
                                    disparado... debe tener tiempo pues esta totalmente gris.



                                    Pase sobre el cadáver y salí hasta los exhibidores del enorme

                                    hipermercado, Máximo venía a mis espaldas tapándose la nariz.


                                            —Mierda que horrible huele... —dijo en silencio.



                                    Cuando entramos en la zona de ventas pudimos ver que el
                                    hipermercado había sido sin duda alguna saqueado, pero aun así

                                    habían cosas en los anaqueles enormes de unos tres metros de
                                    alto, también habían muchas cosas en el suelo tiradas, mire

                                    el segundo piso desde allí que más bien parecía un elevado con
                                    una tienda de celular y la farmacia que buscaba, alli debemos

                                    encontrar los insumos medicos para el refugio, de lo contrario
                                    tendremos que ir a otro sitio en busca de los mismos.




                   180
   175   176   177   178   179   180   181   182   183   184   185