Page 231 - Lévêque, Pierre - El mundo helenístico
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MÁS ALLÁ DE LAS FRONTERAS POLÍTICAS 231
través de tres sustancias esenciales, aire, flegma y bilis, doctrina clásica
en la fisiología india.
Pero en los reinos mediterráneos, las embajadas y el comercio multi
plicaron las informaciones sobre el Lejano Oriente.50 Se admiran la vida
ejemplar y los rasgos de sabiduría de los gimnosofistas.51 La célebre con
versación de Cineas con su maestro, Pirro, sobre la vanidad de las ambi
ciones humanas recuerda, curiosamente, un diálogo entre el rey Korav-
yo y el buda Ratthapalo.
En otros casos no es posible hablar de influencia: por ejemplo, en el de
sarrollo de una verdadera sofística en India y China, contemporánea a la de
Grecia; aunque, un siglo después de Zenón de Elea, el chino Hui Tzu sos
tenga que un bastón que cortemos por la mitad cada día no tendría fin, es
tá claro que no podía conocer a su predecesor helénico. Pero se estableció
una osmosis difícil de definir entre dos zonas tan civilizadas a las que ya
unían tantos vínculos: hemos señalado que las concepciones sobre la reale
za eran próximas y que la apatía o la ataraxia no estaban muy lejos del nir
vana. Megástenes, legado de Seleuco Nicátor en Pataliputra, y cuyo relato
de su viaje fue, probablemente, una de las principales fuentes helenísticas
sobre la India, ya había descubierto una proximidad de costumbres e ideas.
Seguramente quedaba mucho por hacer. Estrabón aún deplora la
escasez de informaciones sobre la India. Sólo la época romana dio un
verdadero impulso a los intercambios intelectuales, gracias a la intensi
ficación del comercio. Fue entonces cuando la India se inició en la as
tronomía, la astrologia y la medicina de los griegos, y tal vez imitase su
teatro. A la inversa, puede sospecharse un influjo indio en la novela he
lénica o el pensamiento de los gnósticos y de Plotino. El monzón acercó
a dos mundos que, después de tantos siglos, ya no podían ignorarse.
Los griegos, la estepa asiática y China
Es difícil confirmar la existencia de relaciones aún más lejanas, con
el mundo de la estepa (ocupada por los iraníes, los saka y los sármatas52
50. Una farsa alejandrina, conservada en papiros, evoca la odisea de unos marineros
griegos naufragados en la costa de Malabar, que son recibidos por el rey del país y olvi
dan su infortunio bebiendo con él hasta perder el sentido.
51. Véase la pág. 121.
52. Sobre los saka, véase la pág. 121; sobre los sármatas, véase la pág. 233.