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Yo Beto: Una Historia Chévere para contar



               Organice una fiesta en el mes de diciembre, ya como empresario independiente con
             mi oficina montada para organización de eventos, se llamaba JOTABE producciones,
             este evento fue en la piscina municipal de la Mesa Cundinamarca, contrate pancartas,
             comerciales en emisora regional, boletería con “gancho” publicitario, la orquesta fueron
             los Graduados con “el loco” Gustavo Quintero y el show de media noche a cargo de
             “la nena” Jiménez. Todo estaba dispuesto para que saliera súper fantástico, si desea
             saber que paso con esta fiesta tan bien organizada, acompáñeme con unos suculentos
             huesos de marrano, preparados en “Las ojonas” o en el campo de tejo “el porvenir del
             norte”, en el barrio san Fernando, donde, no solamente le contare el final de esta apa-
             sionante radio novela, sino que usted sabrá las respuestas a estos interrogantes:
               - Porque si esperaba la entrada a la piscina municipal de 1000 personas, únicamente
             entraron 10…?
               - Como me entere al otro día de la fiesta, que sin querer queriendo, como decía el
             chavo del ocho, un sobrino de Ochoa, el gordote, el de Medellín, fue el que me que-
             bró…?
               - Que negocio me ofrecieron, para recuperar los más de diez millones de pesos que
             había perdido…? Quien me respaldo…? Quien me dijo: “No acepte…”




               En ferias y fiestas del reinado del Durazno en nuevo Colon, una población del valle
             de Tenza en Cundinamarca, el presidente de festividades y alcalde del pueblo, era muy
             amigo de mi jefe inmediato en Coca-Cola en esa época, Alberto Ramírez, por lo tanto,
             como no era mi territorio para atender el evento, fui como presentador del reinado y ani-
             mador de las ferias y fiestas, como favor especial a mi jefe, así que viajé a nuevo Colon.
             Tan pronto llegue, el amigo de don Alberto, en agradecimiento por el detalle, me dijo:
             “Jorgito, no te preocupes de nada, no vayas a gastar tus viáticos, el hotel, alimentación
             y estadía en general, corren por cuenta mía”. Lo que yo no sabía, era que este mismo
             ofrecimiento, se lo había hecho a todos los invitados especiales que veníamos de Bo-
             gotá. Toreros, orquestas, comitivas de reinas, jurado del reinado, etc. Quiere saber que
             paso…? Vamos a comerciales y le cuento. Que tal un granizado de néctar verde…?
             Pero antes les anticipo que, para mí, el número 35, se me convirtió en un karma durante
             4 noches y 5 días, que dure en el reinado.




               Recién muerto mi padre, mi trabajo como el del “Payaso”, debía continuar, esa era la
            cruel realidad y así fue. En el municipio de Madrid (C/marca), el colegio más grande  or-
            ganizo una fiesta con mano a mano musical, entre “Los Hispanos” con Rodolfo Aicardi
            y “Los Graduados” con Gustavo Quintero. Después de un perifoneo durante todo el día,
            anunciando la fiesta, la Asopadres de familia, quedaron tan contentos por el servicio
            de Coca-Cola prestado por mí, que me invitaron a quedarme como invitado especial
            (mesa reservada junto al escenario principal), pintaba bueno cierto…?, quieren saber
            que paso al final…? Disfrutemos de un granizado de néctar verde y les cuento, sino,
            dejemos así ahijadito.


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