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FELIPE LÓPEZ ACEVEDO
modos esa disyuntiva de ser local o ser de fuera no creo que sea importante, lo realmente importante es que
un profesor sea bueno en la materia que imparte, y eso lo consigue cuando se implica y logra hacer útil y
atractiva esa materia a sus alumnos.
Ahora una para el futuro; ¿Crees que las nuevas generaciones se preocupan por el patrimonio del
concejo, y crees que sabrán conservarlo y trasmitirlo adecuadamente a los que vengan?
Tengo mucha confianza en los jóvenes y estoy seguro de que van a saber conservar y transmitir este rico
patrimonio que tenemos a sus hijos y a sus nietos. El gran problema que se plantea es que al paso que
vamos van a ser muy pocos los jóvenes que se quedan aquí por la falta de expectativas y de acceso al
mercado laboral. Por ahí pienso que deben ir los esfuerzos de los dirigentes políticos en los próximos años,
por asegurar un futuro para que buena parte del contingente de jóvenes pueda quedarse, en este sentido me
parece que hay muchas cosas por hacer.
¿Cuál es tu barrio favorito de Cangas? ¿Por qué?
Tengo frescos los recuerdos de Cangas cuando era niño, con sus barrios típicos, sus bodegas, sus callejas y
sus plazoletas. La fisonomía de nuestra villa hoy ha cambiado bastante, de todas formas si tengo que
decantarme por un barrio mi preferido es “La Vega”, es donde me crié e inicié mis primeras correrías y donde
vivo actualmente. Otro barrio al que tengo un gran cariño es “El Cascarín”. Si Almodóvar los conociera
seguro que saldría alguna película exitosa de ellos.
¿De todos los destinos que has tenido en tu vida profesional, qué centro te trae mejores recuerdos y por
qué?
Cierto es que no hubo muchos destinos en mi vida profesional, pero de todos ellos guardo un grato
recuerdo. Mi primer destino en Adralés fue mi primer encuentro con una escuela rural “de las de antes” con
alumnos desde Preescolar a Octavo de EGB todos juntos compartiendo el mismo espacio. La interacción con
los chicos y sus familias era plena y allí sentí lo que significaba ser maestro en un pueblo. Mi segundo
destino fue el CP Alejandro Casona donde por ser el más joven ejercí de Secretario y donde compartí
claustro con algunos de mis viejos maestros de los que tanto aprendí. De allí pasé a Limés, donde comencé
mis primeras experiencias de teatro escolar. Posteriormente tuve la suerte de inaugurar el CP de Vega de
Rengos en 1983, donde una plantilla compuesta por muchos maestros y maestras jóvenes tuvimos que
afrontar innumerables retos para echar a andar el colegio. Luego vinieron mis 12 años seguidos en el CPC de
Obanca, donde además de Ciencias Sociales también impartía clases de E. Física. De Obanca guardo
recuerdos entrañables e imborrables tanto de compañeros y compañeras como de alumnos y alumnas,
pensar que era un colegio con comedor y la convivencia era muy estrecha desde las diez de la mañana hasta
las seis de la tarde. Y mis últimos veintidós años me los pasé en el IES “Cueto de Arbas” antes de la fusión y
después en el IES de Cangas del Narcea. Esta última etapa en el instituto ha sido en mi opinión la más rica
desde el punto de vista profesional y humano. Aquí tuve la ocasión de plantearme nuevos retos pedagógicos
y también de conocer a un gran número de compañeros/as que con el paso del tiempo se han convertido en
amigos/as.
En tu vida laboral has dado clases a prácticamente la mitad del concejo de Cangas, muchos de tus
alumnos de hoy son ya hijos de alumnos tuyos, hijos de amigos, familiares…Coméntanos ¿qué sientes
cuando ves ya de adultos a los niños/as que fueron alumnos tuyos?
Al trabajar tantos años en el mismo sitio por mis aulas han pasado buena parte de los jóvenes del concejo y
también sus hijos. Por suerte logré retirarme antes de que llegaran algún nieto o nieta. Por la calle me
encuentro muy a menudo con ex alumnos que ya pasan de los cincuenta, otros de cuarenta, de treinta…
Muchos de ellos son amigos, colegas de profesión, compañeros de peña, de aficiones, etc. Muchos de ellos
me piden información de sus hijos y yo en clave de humor les explico la teoría de la Evolución de Darwin y
las leyes de la Genética de Mendel
Y por otra parte, trabajar donde vives y dar clase a hijos de conocidos, ¿Ha supuesto alguna vez un
problema para ti? 53
Como decía antes he dado clase a hijos de vecinos, de amigos, de familiares, etc. Nunca supuso un problema
para mí porque siempre he procurado separar y delimitar muy bien lo profesional de lo personal y mi
relación con las familias y con los alumnos ha sido de absoluta sinceridad y franqueza