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Capítulo Siete: Cambio de rumbo | 233
248| En el Jardín de la Sabiduría Capítulo Ocho: El declive del Sabiondo | 249 # “Ver al Rey” es una alusión a la emuná. Cada uno de nosotros que fue capaz de afirmar algo así. absurda con una mezcla de compasión y rechazo por el necio de Hollywood” ? Obviamente rechazaríamos una frase tan
Aunque el mensajero le hubiera dicho que había recibido puede juzgar con justicia, porque su sentido de la honradez y
la carta directamente de manos del rey, el Sabiondo habría la justicia no se han pervertido.
negado y ridiculizado esa respuesta también. Esta es la
manifestación de lo que escribe el Rey David (Salmos 14:1): “El La persona verdaderamente honesta posee un agudo sentido
canalla dice en su corazón: ‘no hay Dios’”. Más adelante de lo que es honesto y lo que no. Su honradez se basa en la
veremos que cuando el Simple, que a esta altura ya es un gran Torá y no en la clase artificial de “honradez” que cambia de
ministro, le dijo al Sabiondo que él había visto al rey con sus colores como el camaleón. Esta persona sabe reconocer las
propios ojos, el Sabiondo le insistió: “¿Y cómo sabes que él mentiras y las confabulaciones y su juicio es verdadero y
realmente es el rey?”. justo. Por lo tanto:
Lo mismo ocurre con la Torá. El canalla niega la Torá, no
porque la Torá no sea verdad sino porque la Torá prohíbe todo Y así actuaba con cada asunto: con la verdad. Toda la gente
aquello que el canalla desea. Y dado que la Torá no le permite lo quería mucho…
al canalla tener lo que desea, él construye una ideología de
fantasía según la cual la Torá no es verdad, Dios no lo permita. Hay un antiguo refrán que dice así: “Todo va según la
cabeza”. Cuando el dirigente es honesto, entonces toda la
Incluso si nos preguntamos el uno al otro si la Torá –“la carta nación es como él. Todas las instituciones del país tratarán
del Rey”– es verdad, ¿cómo sabemos que provino del Rey? de conducirse con honradez e integridad. La vida en un país
La Torá ha sido transmitida de una generación a otra en así es un placer, y todos aman al líder honesto cuya conducta
una cadena ininterrumpida de padre a hijo y de maestro a sirve de inspiración a tantos y que hace tanto por mejorar la
discípulo. Dicha cadena se remonta a hace ya 3.329 años (al calidad de vida de la población. Y dado que el abnegado líder
momento de escribir este libro), cuando 600.000 hombres, sus se esfuerza tanto por beneficiar a la gente, todos lo aman y lo
mujeres, y sus hijos, fueron testigos oculares del descenso de veneran.
Hashem al Monte Sinaí para darnos la Torá. ¿Cómo podemos Imaginemos dos personas que tienen una disputa. Ambos se
dudar del testimonio de más de dos millones de personas? presentan a comparecer ante el gobernador, que es un hombre
Nuestros antepasados presenciaron no solamente la Torá simple y honesto. El gobernador falla en favor de uno de los
siendo escrita frente a sus propios ojos sino también las Diez dos. Por lo general, el que pierde el fallo se pone furioso y le
Plagas, la División del Mar Rojo, la tierra tragándose a Koraj guarda rencor al juez o al árbitro que dictaminó en su contra.
y todo su clan, y muchísimos milagros más. Durante cuarenta Casi siempre el que pierde se siente desairado, y en especial
años, los israelitas comieron el maná, el pan enviado del Cielo, cuando el juez no explica por qué tomó la decisión que tomó.
y bebieron el agua de un pozo milagroso que los acompañaba Además, aun cuando el juez emite su veredicto en conformidad
a lo largo del desierto, en un lugar de total desolación sin con la ley, si la gente sabe que él es un hombre subjetivo o no
más que arena, piedras, serpientes y escorpiones. Hashem les del todo honesto, entonces no van a estar satisfechos con su
proveyó su sustento en forma milagrosa. veredicto. Por otra parte, el juez íntegro debe conducirse de
acuerdo con la ley en sus propios asuntos personales. Si él no
Nuestros antepasados fueron testigos de todos estos milagros es un modelo de honradez, entonces nunca va a poder lograr
con sus propios ojos y transmitieron la tradición a las que los demás sí lo sean.
generaciones siguientes, que también tuvieron su buena cuota