Page 679 - Auge y caída del antiguo Egipto
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También es probable que el soberano que gobernaba el Bajo Egipto al final del
               reinado  de  Ramsés  XI  fuera  de  origen  libio.  La  existencia  de  una  estatuilla

               privada  que  menciona  a  un  «gran  jefe  de  los  ma  Nes[u]banebdyedet»  (Jean

               Yoyotte,  «Les  principautés  du  delta»,  p.  127  y  lámina  III),  sugiere  que  este
               nombre  era  común  entre  la  población  libia  del  delta,  lo  que  contribuye  así  a

               reforzar  la  identificación  como  libio  del  rey  del  mismo  nombre.

               Nesbanebdyedet, «El rey, el señor-carnero de Dyedet», es más conocido por la

               forma  griega  de  su  nombre,  Smendes,  pero  la  versión  original  egipcia  evoca
               mejor las elaboradas formulaciones tan caras a los reyes de la XXI Dinastía. Lo

               mismo  puede  decirse  de  Pasebajaenniut,  al  que  normalmente  se  alude  por  la

               forma griega de su nombre, Psusenes.
                  Sobre el indiscutible carácter libio de la XXI Dinastía, véase, entre las obras

               más recientes, Eva Lange, «Legitimation und Herrschaft». La importancia de las

               genealogías  se  analiza  en  Lisa  Montagno  Leahy  y  Anthony  Leahy,  «The

               genealogy  of  a  priestly  family  from  Heliopolis».  Hay  numerosos  ejemplos  de
               nombres de trono reciclados durante generaciones: Pasebajaenniut I y Osorkon

               el  Viejo  compartían  nombres  de  trono  casi  idénticos;  Sheshonq  I  copió  su

               nombre de trono del de Nesbanebdyedet, y Takelot I, Takelot II y Sheshonq IV
               hicieron lo mismo; Osorkon II copió el nombre de trono de Amenemope, como

               hicieron también Padibastet I, Osorkon III y Rudamón; Sheshonq III copió el

               nombre de trono de Ramsés II, y Pimay hizo lo mismo; Peftyauauybast copió el
               nombre de trono de Amenemnesu, aunque tuvo que omitir el epíteto Heqauaset

               («gobernante de Tebas») dado que había abandonado la ciudad ante la expansión

               kushita.  Sobre  el  cambio  en  la  concepción  de  las  tumbas,  especialmente  en
               Tebas, véase Takao Kikuchi, «Die thebanische Nekropole der 21. Dynastie».

                  Las  publicaciones  clásicas  sobre  Dyanet  y  sus  tumbas  reales  son  las  del

               principal excavador del yacimiento, Jean Yoyotte; especialmente útiles resultan

               «Tanis» y «The royal necropolis of Tanis and its treasures». Sobre la trayectoria
               profesional de Uendyebaendyedet, véase Toby Wilkinson, Lives of the Ancient

               Egyptians (n.º 84). Con respecto a los detalles en torno al robo sistemático de las
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