Page 682 - Auge y caída del antiguo Egipto
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inscripción del llamado «pórtico de los Bubastitas» de Ipetsut, descrita en The
Epigraphic Survey, Reliefs and Inscriptions at Karnak III. Puede verse una
accesible representación cartográfica de la campaña en Bill Manley, The Penguin
Historical Atlas of Ancient Egypt (pp. 102-103). Resulta difícil reconciliar el
relato bíblico del «rey Sisac» con los datos egipcios sobre la campaña de
Sheshonq en dos aspectos: en primer lugar, Jerusalén se halla ausente de la lista
de Ipetsut en que se enumeran las ciudades derrotadas y conquistadas, aunque
también es cierto que una parte de la inscripción se ha perdido; y, en segundo
lugar, la mayoría de las conquistas enumeradas en Ipetsut se produjeron en
Israel, no en Judá. John Bimson, en «Who was King Shishak of Egypt?»,
proporciona un útil análisis de las dificultades que comporta aunar las dos
fuentes. Como resultado de esas discrepancias, existe la creciente —por más que
algo desesperada— opinión de que Sheshonq I debió de llevar a cabo al menos
dos campañas en Oriente Próximo, una de las cuales quedaría registrada en
Ipetsut y la otra, en la Biblia. El hijo y el nieto de Sheshonq I fueron Osorkon I
(925-890) y Takelot I (890-874) respectivamente.
Todavía no existe un consenso generalizado en torno a la relación exacta entre
las diversas dinastías y ramas colaterales de la familia real en los siglos IX y VIII
a.C., aunque la opinión académica parece decantarse por el panorama general
sugerido por David Aston y John Taylor en «The family of Takeloth II», y Karl
Jansen-Winkeln en «Historische Probleme der 3. Zwischenzeit». Hay que
señalar que la teoría de la existencia de una «XXIII Dinastía tebana», que,
fundada por Takelot II, habría gobernado en la misma época en que la XXII
Dinastía lo hizo en Bast, ha sido refutada por el decano de los estudiosos del
Tercer Período Intermedio, Kenneth Kitchen (The Third Intermediate Period, pp.
XXVIII-XXXIV); aun así, dicha teoría es la que más sentido da a las fragmentarias y
confusas evidencias, y es la que se ha seguido aquí. Pueden verse los árboles
genealógicos detallados y un análisis de las relaciones entre los diversos
gobernantes y dinastías en The Complete Royal Families (pp. 210-231), un