Page 115 - Santoro, Cesare El Nacionalsocialismo
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La industria aeronáutica y sus anexas que se reunieron en el “Grupo de la industria
aeronáutica” experimentó con esta reorganización un grandioso progreso en su
rendimiento y resuelve a la perfección la misión que se le ha confiado. Sus necesidades
han podido quedar resueltas gracias a la realización del Plan Cuadrienal, segunda gran
obra, que el Führer encomendó al Ministro de Aviación Hermann Göring, ya que
merced a sus disposiciones, para independizar a Alemania del Extranjero en la cuestión
de las materias primas, se han beneficiado también, largamente, a los constructores de
material aéreo.
Defensa Antiaérea
La defensa antiaérea interviene en casi todas las ramas de la administración del Estado y
es de mayor importancia, como reiteradas veces lo ha manifestado personalmente el
ministro de Aviación, para las construcciones urbanas y disposición del territorio, para
los servicios públicos de agua, gas y electricidad, medios de comunicaciones fluviales y
terrestres. La ley de defensa antiaérea del 26 de junio de 1935 y las disposiciones
ejecutivas del 4 de mayo de 1937, inspiradas en la idea fundamental del
nacionalsocialismo, precisamente aquí, en que Pueblo y Estado deben formar una
comunidad indisoluble, colocan en término principal dos normas: primeramente todas
las instituciones públicas adecuadas, de acuerdo con sus actividades, deben colaborar en
los fines de la defensa antiaérea bajo la dirección del ministro de Aviación, en segundo
lugar, todos los alemanes están obligados a prestar servicio de defensa antiaérea, es
decir, prestación de servicios personales y materiales, “igualmente quedan obligados a
hacer, soportar y omitir todo lo que sea necesario para el mejor cumplimiento de la
defensa antiaérea”.
No es posible, desde luego, dar cifras sobre las fuerzas militares de Alemania, salvo de
la marina de guerra, la cual es conocida por razón de los tratados internacionales. Sin
embargo, podemos dar a conocer indicaciones generales: las fuerzas militares de
Alemania no cabe duda que están a la altura de su misión, garantizar la seguridad
nacional y hacer frente a cualquier ataque por tierra, mar o aire; pero parecen ser
insuficientes para una guerra de conquista o cualquier otra empresa de aventura.
La Alemania de 1914 tenía el ejército más fuerte del mundo y una flota que podía
enfrentarse con éxito a las más poderosas armadas. Pero este enorme organismo era el
resultado de una paz interior y exterior que a lo largo de 43 años trajo al país la
prosperidad y el bienestar. La Alemania de 1938 solo ha tenido cinco años de tiempo
para organizar su defensa nacional; cinco años, a los que había que añadir la difícil labor
de la reconstrucción nacional sobre las ruinas de un pasado de decadencia. Claro es que
la técnica actual facilita en la construcción de material de guerra una producción mucho
más rápida que en el pasado; la capacidad de rendimiento de la industria alemana, tanto
cuantitativa como cualitativamente, desempeña aquí un papel importante. Pero la
preparación técnica del personal, y en especial la de los cuadros de mando, requiere
tiempo si, como sucede en Alemania, no hay reservas con la instrucción militar
necesaria.
Los datos astronómicos publicados por cierta prensa extranjera son en todo caso
exagerados.
Algo podemos asegurar: la magnitud, la extensión y el ritmo de la obra de
reconstrucción militar en estos cinco años parecen en efecto milagrosos. El 30 de enero
de 1933 existía solo un ejercito profesional de 100.000 hombres con armamento
totalmente insuficiente (¡artillería pesada de madera y tanques de cartón ...!). Hoy se
cuenta con un nuevo ejército nacional, multiplicado, y equipado con todos los tipos de
las armas más modernas; ayer: 7b divisiones de infantería y 3 de caballería; hoy: 18
cuerpos de ejército con fortificaciones perfectas y un sistema de reservas bien
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