Page 195 - Egipto TOMO 2
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196                 EL EGIPTO SUPERIOR
                 á qué dias del calendario correspondian las fiestas que celebraban; á qué acontecimientos de
                 su existencia concedían más importancia, y la manera como dispusieron que se les enterrase.
                   Pero en Beni-Hassan, lo mismo que en Memphis, seria inútil buscar explicación alguna
                 respecto de las creencias que tenían los egipcios relativamente á los destinos ulteriores  y
                 definitivos del alma en el otro mundo; pues sus inscripciones dicen únicamente relación á la
                 vida terrena y al enterramiento de los cuerpos. Los nobles príncipes de Mah (conocidos por
                 Hermopolites por los griegos), hallábanse enlazados con los faraones por medio del matri-
                 monio  :  los reyes á quienes servían, con los Amenemha y los Usertesen de la duodécima
                 dinastía, no  residían  en Memphis, en  el  bajo  Egipto,  sino en Tébas,  en  el Egipto
                 superior. El primero de estos Amenemha, probablemente usurpó el trono á la undécima






















                                   ESCENA DE ANIMALES, SACADA DE UN SEPULCRO EGIPCIO
                 dinastía, que reinaba en la ciudad de Amon, movido por el deseo de fomentar el bien del
                 país, cuya prosperidad interior se desenvolvió extraordinariamente, merced á los cuidados
                 y á la sabiduría de sus sucesores. ¿Qué necesidad hay ahora de citar uno por uno los reyes
                 que se sucedieron, los pueblos que sometieron á su dominio, las batallas que ganaron? Es
                 preferible indicar todo aquello que, referente á los mismos, sea digno de mención: por lo
                 ménos juzgamos que han de agradecérnoslo aquellos que estimen en algo conocer la manera
                 cómo se fué desenvolviendo la civilización en esas edades remotísimas. Mucho existia, en este
                 concepto, que merece ser conocido, en la época que vio abrir los sepulcros de Beni-Hassan.
                   Los reyes de la dinastía undécima habían establecido ya el amplísimo camino internacional
                 que une  el Nilo al mar Rojo, y por el Uadi Hammamat de nuestros dias, conduce desde
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