Page 366 - Egipto TOMO 2
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TEBAS
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                 Cuantos sucesos referentes á la vida política tuvieron lugar con posterioridad á la expulsión
                 de los Hvksos, han dejado en ellos marcada su huella, que puede distinguirse perfectamente
                 no obstante el tiempo transcurrido: las inscripciones y las pinturas y esculturas que mate-
                 rialmente cubren los muros, nos reflejan como un espejo numerosos hechos y circunstancias
                 decisivas para los destinos del nuevo imperio. Trasladémonos, pues, haciendo un verdadero
                 esfuerzo de abstracción, al centro de esa inmensa obra de gigantes, y de la propia suerte que
                 hemos expuesto á la mirada del lector las grandezas del Cairo, ensayémonos en la obra de la
                 reconstrucción de Tébas, siguiendo de paso la historia de los príncipes que salieron de ella.
                      Este                  Los Hyksos habian arrojado del Bajo Egipto la
                     -aflija
                                          antigua raza de los Faraones. Los vencidos reina-
                                          ron sin gloria y sin llevar á cabo grandes empresas,
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                                          durante el período de cuatro siglos y medio, sobre
                                          los nomos meridionales del país, conservando en
                                          ellos la antigua religión,  la civilización y las artes
                                          de su raza. Los invasores, ménos adelantados que
                                          sus súbditos, se apropiaron completamente la civili-
                                          zación v las artes de los vencidos, además de las
                                          ciencias: tenemos de ello una prueba concluyente,
                                          siquiera negativa, en la circunstancia de no haber
                                          dejado huella alguna de su paso en las orillas del
                                  Nilo; pues  la verdad  es que, por más que se busque, no se
                                  encuentra instrumento,  oficio,  ni  aptitud alguna que pueda
                                  referirse al pueblo invasor.  Éste se mostró hostil únicamente á
                                  los dioses de Egipto, fijándose, sin embargo, en Seth, que era el
                                  que más puntos de semejanza tenia con su Baal, para tributarle
                                  culto de adoración por medio de oraciones y  sacrificios. Por lo
                                  demás, compréndese fácilmente que habian de suscitarse toda
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                                                                    fronteras,
                                  suerte de reclamaciones, por cuestión de límites y
                                  entre  los invasores y  los faraones legítimos,  relegados á las
                                  regiones meridionales. Un papirus conservado en Londres con-
                 PLANO DEL GRUPO PRINCIPAL DE EDIFICIOS  signa que el príncipe Hykso Apofis tuvo un conflicto con el rey
                     EXISTENTE EN KARNAK
                                  egipcio Raskenen Taa,  el cual terminó con un encuentro favo-
                 rable á  los  egipcios;  y  la  inscripción fúnebre  de un  capitán de un buque, Aahmes,
                 descubierta en El-Kab, al Sur de Tébas, completa las noticias que se encuentran en la obra
                 de Manethon  relativas á la libertad de Egipto  del yugo de los Hyksos. Como Ptah en
                         ,
                 Memphis y Ra en Heliópolis, Amon había sido siempre el dios principal de la Tebaida. Los
                 príncipes del Sur se pusieron bajo su égida y emprendieron la campaña contra los extran-
                 jeros dueños  del Norte.  Aprestóse una flota formidable en las aguas del Nilo; Kames,
                 sucesor de Raskenen, continuó la lucha por la independencia: Aahmes, hijo de Kames,
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