Page 483 - Egipto TOMO 2
P. 483
DE LA CIUDAD DE AMON A LA CATABATA
398
alejarlo de Roma, donde se le temia, enviósele como prefecto á esta apartada región. No hay
para que decir que no se corrigió entre los egipcios, y con versos terribles se cebó en las
supersticiones del país, especialmente en lo tocante al culto tributado á los animales. Sin
embargo, en medio de sus arranques satíricos, se encuentra más de un pasaje que revela
BAZAR EN ASUAN
que el poeta se condolia de encontrarse desterrado en los mismos límites de la zona tórrida.
Hé aquí uno de ellos:
Si la naturaleza ha negado un corazón tierno al hombre elevado,
En cambio le ha concedido el “beneficio del llanto,
Que es, sin duda alguna, la más noble prerogativa de la humana naturaleza.