Page 351 - Orgullo y prejuicio
P. 351
––Por lo primero. La observé detenidamente durante las dos visitas que
le hice últimamente, y me quedé convencido de su cariño por Bingley.
––Y su convencimiento le dejó a él también convencido, ¿verdad?
––Así es. Bingley es el hombre más modesto y menos presumido del
mundo. Su apocamiento le impidió fiarse de su propio juicio en un caso de
tanta importancia;. pero su sumisión al mío lo arregló todo. Tuve que
declararle una cosa que por un tiempo y con toda razón le tuvo muy
disgustado. No pude ocultarle que su hermana había estado tres meses en
Londres el pasado invierno, que yo lo sabía y que no se lo dije a propósito.
Se enfadó mucho. Pero estoy seguro de que se le pasó al convencerse de
que su hermana le amaba todavía. Ahora me ha perdonado ya de todo
corazón.
Elizabeth habría querido añadir que Bingley era el más estupendo de los
amigos por la facilidad con que se le podía traer y llevar, y que era
realmente impagable. Pero su contuvo. Recordó que Darcy tenía todavía
que aprender a reírse de estas cosas, y que era demasiado pronto para
empezar. Haciendo cábalas sobre la felicidad de Bingley que, desde luego,
sólo podía ser inferior a la de ellos dos, Darcy siguió hablando hasta que
llegaron a la casa. En el vestíbulo se despidieron.