Page 231 - Educación en Bolivia (Warisata) y México (Chuminópolis) Arturo Vilchis
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IV. La Escuela Indigenal Ayllu de Warisata 235
De manera semejante señalaba el sustento organizativo interno a
través de una organización propia de raíz ancestral: el Parlamento
de Amautas. También se presentó el Reglamento de las Escuelas
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Indígenas, decretado durante el mandato del presidente provisio-
nal, general Carlos Quintanilla.
Aunque el proyecto de educación indígena se fundó sobre las
bases de las experiencias presentadas por la Delegación de los Es-
tados Unidos, se tomó en cuenta la ponencia del boliviano Elizar-
do Pérez para recomendar tres puntos respecto a la conformación
de un proyecto educativo indígena: 1) la constitución de escuelas a
partir de la idea del núcleo escolar; 2) considerar la edificación de
escuelas en comunidades indígenas y 3) participación plena de los
pobladores de las comunidades en la organización, administración
y economía de la escuela. 155
154 “Se trata de convertir la ulaka antigua en un parlamento de amautas, esto
es, parlamento de hombres de consejo, célula que posteriormente se convirtió
en la junta de administración que hoy gobierna cada una de las escuelas de re-
cuperación indígena. En ella se hallan representados los maestros, los padres de
familia, las autoridades indígenas de la escuela y los alumnos del instituto. […]
Sin su intervención, sin sus deliberaciones, sin su definitiva resolución, no se hace
nada, no se construye nada, no se compra nada, no se toma determinación algu-
na”. Ibid., p. 6.
155 De manera sintética los puntos en los cuales se refiere la fuerte influencia
o apropiación de algunas perspectivas que la Escuela de Warisata en Bolivia ya
había planteado y que se utilizó en el Plan de Educación Indigenal del Congreso
son: “2) Organización de las escuelas indígenas de acuerdo a las modalidades de
la región, teniendo en cuenta las condiciones geográficas, su porvenir económico
y las tradiciones y costumbres de las comunidades indígenas. 3) Levantarse en
el corazón mismo de las comunidades indígenas. 4) Participación activa en los
proyectos educativos de los indígenas de la región y los padres de familia, en la
organización, ejecución y gobierno de la escuela, contribuyendo en su levanta-
miento material en forma voluntaria, coadyuvando a su mantenimiento moral y
físico y participando en la labor de la escuela”. “Plan de Educación Indigenal”,
Acta Final del Primer Congreso Indigenista Interamericano, Pátzcuaro, 1940, pp. 23 y ss.