Page 118 - Maquiavelo, Nicolas. - El Principe [1513]
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80  NICOLAS MAQUIAVELO

      menospreciado  16•   En cambio, Pertinax, hecho emperador
      contra la voluntad de los soldados  (que acostumbrados a
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      vivir licenciosamente  bajo Cómodo,  no pudieron sopor-
      tar aquel tipo de vida honesta a la que Pertinax quería con-
      ducirles), habiéndose granjeado el odio de estos, al que se
      añadió un sentimiento  de menosprecio debido a su avan-
      zada  edad,  fracasó  en  los  primeros  momentos  de  su
      administración.
        Y aquí se debe señalar que el odio se gana tanto con las
      buenas como con las malas obras; así que, como ya dije an-
      tes, un príncipe que quiera mantener su estado se ve a me-
      nudo forzado a no ser bueno; porque, cuando aquella co-
      lectividad, ya sean pueblos, soldados o grandes  señores
      -que  tú juzgues necesitar para mantenerte-  esté corrom-
      pida, te conviene seguir su humor para satisfacerla; con lo
      que entonces las buenas obras son tus enemigas. Pero pa-
      semos a Alejandro, que fue tan bondadoso que entre las mu-
      chas alabanzas que mereció, está la de que en los catorce
      años de gobierno nadie fue ejecutado sin previo juicio; no
      obstante, tenido por afeminado y por hombre que se deja-
      ba dominar por su madre -lo  que le acarreó el desprecio
      de todos-  el ejército conspiró contra él y lo asesinó.
        Examinando  ahora,  por contra,  las características  de
      Cómodo,  de Severo, Antonino  Caracalla y Máximo, ve-
      remos que fueron extremadamente crueles y rapaces y que
      para satisfacer a sus soldados no se abstuvieron de ningún
      tipo de injuria que pudiera infligirse al pueblo; y todos, ex-
      cepto Severo, tuvieron un triste fin. Porque en Severo hubo
      tanta virtud, que conservando la amistad de los soldados, y
      a pesar de oprimir al pueblo, pudo siempre reinar feliz-
      mente; porque sus virtudes le hacían tan admirable a los
      ojos de sus soldados y del pueblo, que éstos quedaban en

        16   Marco Aurelio, hijo adoptivo de Antonino Pío, accedió al trono, «iure
      hereditario», en el año 161 y reinó hasta el 180 en el que murió, en Vin-
      dibona, durante una expedición contra los Marcomanos.
          Publio Elvio Pertinax, a pesar de que fue aclamado emperador por
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      los pretorianos el 1.0 de enero del año 193, murió asesinado por sus sol-
      dados a los que, en contra de lo esperado, no había hecho ninguna con-
      cesión especial, el 28 de marzo del mismo año 193.
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