Page 40 - 24 Rutherford

Bohr era un físico principalmente
FIG. 10
teórico y con poca experiencia en
la investigación experimental, pero
eso no impidió que aquella colabo-
I¡ ración fuera muy fructífera ( quizá
ayudó el hecho de que ambos fue-
; - ran apasionados deportistas, uno

ee e e e e muy aficionado al rugby y el otro
al fútbol).
e ee ee e e e Aunque Rutherford le había
e e - e e e asignado una serie de experimen-
tos, finalmente lo liberó de ese tra-
bajo para que pudiera dedicarse
por completo al modelo atómico,
El efecto asunto con el que Bohr había quedado fascinado. Estaba conven-
fotoeléctrico es
un ejemplo cido de que iba a encontrar la manera de superar el problema de
de interacción la inestabilidad de los electrones.
luz-materia, por el
cual se explica Bohr resituó en el seno de los átomos algunos de los princi-
que al incidir
con radiación pios cuánticos que se empezaban a gestar con las grandes aporta-
electromagnética ciones de Ma.x Planck y Albert Einstein para así lograr estabilizar
(típicamente luz
ultravioleta) sobre el modelo atómico de Rutherford. Según Planck, la energía no era
un material, se continua, sino que existía en forma de paquetes. Einstein, por su
produce una
absorción de lado, usó la física cuántica para explicar el efecto fotoeléctrico
energía, llegando
a arrancar ( efecto por el que un metal emite electrones cuando incide sobre
electrones del él radiación electromagnética). Einstein propuso que los electro-
material irradiado
(emisión de nes absorbían la energía de los fotones, y esta energía les permitía
electrones).
liberarse de los átomos y emitirse al adquirir la suficiente energía
cinética, desligándose del núcleo (figura 10).
Bohr conocía muy bien las ideas cuánticas que se habían em-
pezado a gestar desde principios de siglo. Empezó por afirmar que
los electrones no irradiaban energía mientras se movían alrededor
del átomo, y por eso no se precipitaban en el núcleo atómico. Este
paso tan simple suponía en realidad subvertir las leyes del elec-
tromagnetismo y proclamar que estas no eran de aplicación en el
interior del átomo.
Según Bohr, los electrones solo podían moverse por unas ór-
bitas concretas y prefijadas. No todas las órbitas están permitidas

40 EL DESCUBRIMIENTO DEL NÚCLEO ATÓMICO