Page 82 - Mucho antes de ser mujer
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Mucho antes de ser mujer
Llevábamos más de un cuarto de hora en la sala, esperando
alguna noticia, cuando un médico joven, con gesto serio, se acercó
a nosotros.
—¿Señora Forcano? —preguntó directamente a mi tía.
—Sí, soy yo, ¿qué es lo que ocurre?
—Soy el doctor Lardín, lamento que no hayan podido entrar
antes, hemos tenido problemas; ya pueden pasar a ver a su sobrina,
ahora está consciente.
Una sensación de infinito alivio me invadió de pronto, hasta
hacía sólo unos segundos teníamos la seguridad de que mi madre
había muerto ya. Aún nos estábamos recuperando del shock cuan-
do vimos salir al asistente empujando una camilla, alguien total-
mente cubierto con una sábana era transportado sobre ella. Los tres
nos quedamos mirando al bulto que se podía apreciar bajo la tela y
ante nuestra inquietud el doctor Lardín dijo.
—Es una muchacha que estaba en la cama contigua, no he-
mos podido hacer nada por ella.
—¿De qué ha muerto? —preguntamos casi al unísono mi tía
y yo.
—Una sobredosis, la recogió la ambulancia en el parque Tru-
jillo.
—¿En el parque Trujillo? —pregunté.
—Sí, eso han dicho los camilleros.
—¿Se sabe quién es?
—No, no hemos podido localizar a ningún familiar o amigo,
llegó sin documentación, no tendría más de dieciocho años.
No pude evitar un sobresalto, el parque Trujillo era el que se
encontraba delante del instituto, junto al cual yo había intentado
suicidarme, me intrigaba saber quién podría ser aquella chica, a lo
peor era alumna del colegio y la conocía.
—¿Sabe si asistía a la escuela que se encuentra frente al parque?
—le pregunté.
—No, no tengo idea, ¿conoces el lugar?
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