Page 296 - Luna de Plutón
P. 296
—Ya se lo han ordenado los guardias de seguridad, su majestad ¡pero se empeña
en zafar la placa!
—Igual a su padre —murmuró Rockengard.
—¡Su majestad, la nave de los elfos está en problemas! ¡La veo expulsando un
montón de fuego de sus turbinas!
La alarma general se había disparado en La Anubis. Las computadoras del
Ingeniero Jefe se había vuelto locas, y una lluvia de chispa continua caía sobre la sala
de control.
—¡¡Reporte de daños!!
—¡Golpe directo en las turbinas, Shah! ¡Oh, maldición!
Panék ayudaba a un alférez a colocarse de pie y sentarlo en su silla. El elfo apoyó
la espalda sobre el respaldo, semiinconsciente.
—Hemos perdido casi todo el poder —anunció Degauss, viendo cómo las barras
de energía bajaban—. Ya perdimos la capacidad de entrar a la velocidad de la luz. Ya
no hay nada que hacer.
—¡La Parca Imperial prepara su cañón principal!
—Es el Vigor Cósmico.
Panék caminó hasta la pantalla principal, abarcada por completo por la gigantesca
nave negra.
—¡Shah! ¡La Tungstenio está volviendo!
—¿Qué? ¡NO!
—Están preparando el Dedo del Diablo.
—Oh dios mío, se van a dar una contra la otra… ¡Miren la pantalla!
—Su majestad, La Anubis nos está llamando.
—¡Ignoren el llamado! ¡Ya sé lo que Panék me va a decir! ¡¿Estás preparado,
Rockengard?!
—Sí, Metallus. Tenemos que abrir fuego antes que ellos disparen su cañón.
—¡Adelante entonces!
—¡Los tres reactores están en línea!
—¡Energía al 40… 60…!
—¡No, esperen, esperen! —gritó el teniente—. ¡Miren por la pantalla!