Page 162 - Drácula
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Drácula de Bram Stoker
Al cabo de otra hora, Lucy despertó de su sueño, fresca
y brillante, y desde luego mirándose mucho mejor de lo que se
podía esperar debido a su terrible prueba.
¿Qué significa todo esto? Estoy comenzando a pregun
tarme si mi larga costumbre de vivir entre locos no estará empe
zando a ejercer influencia sobre mi propio cerebro.
Del diario de Lucy Westenra
17 de septiembre. Cuatro días y noches de paz. Me es
toy poniendo otra vez tan fuerte que apenas me reconozco. Es
como si hubiera pasado a través de una larga pesadilla, y acaba
ra de despertar para ver alrededor de mí los maravillosos rayos
del sol, y para sentir el aire fresco de la mañana. Tengo un ligero
recuerdo de largos y ansiosos tiempos de espera y temor; una
oscuridad en la cual no había siquiera la más ligera esperanza
de hacer menos punzante la desesperación. Y luego, los largos
períodos de olvido, y el regreso hacia la vida como un buzo que
sale a la superficie después de sumergirse. Sin embargo, desde
que el doctor van Helsing ha estado conmigo, todas estas pesa
dillas parecen haberse ido; los ruidos que solían asustarme has
ta sacarme de quicio, el aleteo contra las ventanas, las voces
distantes que parecían tan cercanas a mí, los ásperos sonidos
que venían de no sé dónde y me ordenaban hacer no sé qué,
todo ha cesado. Ahora me acuesto sin ningún temor de dormir.
Ni siquiera trato de mantenerme despierta. Me he acostumbrado
bastante bien al ajo; todos los días me llega desde Haarlem una
noche
caja llena. Hoy por la se irá el doctor van Helsing, ya que
tiene que estar un día en Ámsterdam. Pero no necesito que me
cuiden; ya estoy lo suficientemente bien como para quedarme
sola. ¡Gracias a Dios en nombre de mi madre, y del querido Art
hur, y de todos nuestros amigos que han sido tan amables! Ni
siquiera sentiré el cambio, pues anoche el doctor van Helsing
durmió en su cama bastante tiempo. Lo encontré dormido dos
veces cuando desperté; pero no temí volver a dormirme, aunque
las ramas o los murciélagos, o lo que fuese, aleteaban furiosa
mente contra los cristales de mi ventana.
Recorte de La Gaceta de Pall Mall, 18 de septiembre
EL LOBO QUE ESCAPO PELIGROSA AVENTURA DE
NUESTRO REPORTERO
Entrevista con el guardián del Jardín Zoológico
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