Page 323 - Drácula
P. 323
Drácula de Bram Stoker
¿En cuanto a la seguridad…? ¡Gran Dios! ¡El conde ha estado
con él y se prepara algún otro tremendo horror!
Más tarde. He ido a ver a van Helsing después de termi
nar mi ronda y le he comunicado mis sospechas. Se puso muy
serio y, después de reflexionar en ello por un momento, me pidió
que lo llevara a ver a Renfield. Así lo hice.
Cuando llegamos junto a la puerta de la habitación del
alienado, oímos que estaba cantando al interior con mucha ale
gría, como acostumbraba hacerlo en una época que parecía
encontrarse ya muy atrás. Al entrar vimos que había extendido el
azúcar, como acostumbraba hacerlo antes, y que las moscas,
sumidas en el letargo del otoño, comenzaban ya a zumbar en la
habitación. Tratamos de hacerlo hablar sobre el sujeto de nues
tra conversación anterior, pero se negó a prestarnos atención.
Continuó cantando, tal y como si no estuviéramos con él en ab
soluto. Había conseguido un pedazo de papel y lo estaba do
blando, al interior de una libreta de notas. Tuvimos que irnos, sin
haber aprendido nada nuevo.
Es realmente un caso curioso. Tendremos que vigilarlo
esta noche.
Carta de Mitchell, Sons & Candy a lord Godalming
1 de octubre
“Su señoría:
"Estamos siempre muy bien dispuestos a satisfacerlo en
sus deseos. Estamos en condiciones, con respecto a los deseos
de Su Señoría, expresados por el señor Harker de parte de us
ted, de darle los informes requeridos sobre el número trescientos
cuarenta y siete de Piccadilly. Los vendedores originales son los
herederos del difunto señor Archibald Winter Suffield. El com
prador es un noble extranjero, el conde de Ville, que efectuó
personalmente la compra, pagando al contado el precio estipu
lado, si Su Señoría nos excusa el empleo de una expresión tan
sumamente vulgar. Aparte de esto, no conocemos absolutamen
te nada más respecto al mencionado conde.
"Somos, señor, los más humildes servidores de Su Se
ñoría,
"MITCHEL, SONS & CANDY"
322