Page 413 - Drácula
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Drácula de Bram Stoker
Oigo ganado a lo lejos. Hay otro sonido, uno muy extraño, co
mo...
Guardó silencio y se puso pálida, intensamente pálida.
—¡Continúe, continúe! ¡Se lo ordeno! ¡Hable! —dijo van
Helsing, en tono firme. Al mismo tiempo, la desesperación apa
reció en sus ojos, debido a que el sol, al salir, estaba enrojecien
do incluso el rostro pálido de la señora Harker. Esta abrió los
ojos y todos nos sobresaltamos cuando dijo dulcemente y, en
apariencia, con la mayor falta de interés:
—¡Oh, profesor! ¿Por qué me pide usted que haga lo
que sabe que no puedo? ¡No recuerdo nada! —entonces, viendo
la expresión de asombro en nuestros ojos, dijo, volviéndose de
unos a otros, con una mirada confusa—: ¡Qué les he dicho?
¿Qué he hecho? No sé nada; sólo que estaba acostada aquí,
medio dormida, cuando le oí decir a usted: "¡Continúe! ¡Conti
núe! ¡Se lo ordeno! ¡Hable!" Me pareció muy divertido oírlo a
usted darme órdenes, ¡como si fuera una niña traviesa!
—¡Oh, señora Mina! —dijo van Helsing tristemente—.
¡Eso es una prueba, si es necesaria, de cómo la amo y la honro,
puesto que una palabra por su bien, dicha con mayor sinceridad
que nunca, puede parecer extraña debido a que está dirigida a
aquella a quien me siento orgulloso de obedecer!
Se oyen silbidos; nos estamos aproximando a Galatz.
Estamos llenos de ansiedad.
Del diario de Mina Harker
30 de octubre. El señor Morris me condujo al hotel en el
que habían sido reservadas habitaciones para nosotros por telé
grafo, puesto que él no hablaba ninguna lengua extranjera y, por
consiguiente, era el que resultaba menos útil. Las fuerzas fueron
distribuidas en gran parte como lo habían sido en Varna, excepto
que lord Godalming fue a ver al vicecónsul, puesto que su título
podría servirle como garantía inmediata en cierto modo, ante el
funcionario, debido a que teníamos una prisa extraordinaria.
Jonathan y los dos médicos fueron a ver al agente de embarque
para conocer todos los detalles sobre la llegada del Czarina
Catherine.
Más tarde. Lord Godalming ha regresado. El cónsul está
fuera y el vicecónsul enfermo; de modo que el trabajo de rutina
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