Page 68 - El arte japonés de la guerra : entendiendo la sabiduría de la estrategia
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64            EL ARTE  JAPONÉS  DE LA GUERRA


                  Pensar  en  liberarse  de la enfermedad  es apegarse a ella,
               pero  si utilizas  este  apego  para ello, éste no  permanecerá;  a
               esto  se  le llama  entrar  en  el apego  para  liberarse  de él.

             Según el maestro  zen  clásico  chino  Baizhang,  mientras
          exista  una  práctica  y una  realización  zen  voluntarias,  la
          enseñanza  es  todavía  incompleta.  Sólo  cuando  se  han  tras-
          cendido  las  fases  de  la práctica  y del  logro  es  cuando  se
          alcanza la enseñanza  completa. Wansong,  un maestro  chino
          posterior,  resumió  esto  en  un  proverbio:  «Es  fácil  avanzar
          con  cada  paso;  es  difícil  dejar  partir  cada  estado  de  la
          mente.»  Siguiendo  las enseñanzas  zen,  el maestro  en  el arte
          de la espada  Yagyu  define  el nivel  avanzado  de  su  arte  en
          términos  de espontaneidad y libertad.

                  En el nivel  avanzado,  liberarse  de la enfermedad  signi-
               fica  no  tener  ningún  pensamiento  sobre  ello.  Pensar  en
               liberarse  es  en  sí mismo  la enfermedad.  Permitirla  viviendo
               en  medio  de ella  es  liberarse  de la enfermedad.
                  Pensar  en  liberarse  ocurre  porque  la enfermedad  está
               todavía  en  la mente.  Por  eso,  ésta  no  ha cesado  en  absolu-
               to, y cualquier  cosa  que  pienses  o  hagas  comporta  apego,
               así que  no  puede  haber  gran  valor  en  ello.
                  Los maestros  en  cualquier  arte  no  pueden ser  llamados
               adeptos  mientras  no  hayan  dejado  detrás  el apego  a  sus
               diversos  conocimientos.

             El  Tao  Te  King,  libro  clásico  taoísta  estudiado  en  la
          escuela  del  maestro  zen  Takuan,  dice  que  «los  grandes
          adeptos parecen  como  si fueran  ineptos».  Aunque  exterior-
          mente  esto  pueda parecer  humildad,  tal como  se  la entien-
          de  ordinariamente,  en  la  tradición  esotérica  es  al mismo
          tiempo  un  recurso  de protección  y un  medio  de conservar
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