Page 335 - Guerra civil

GUERRA CIVIL III

ante su rapidez, los que los descubrieron atrás los detu­
vieron. 4 Los nuestros, conociendo la emboscada,4 para
no esperar al resto de nuestras tropas, atacaron a dos
escuadrones con los que se habían topado. El único que
escapó con vida fue Marco Opimio, prefecto de caba­
llería. 6 Todos los restantes de aquellos escuadrones, o
fueron muertos, o fueron capturados y llevados ante Do­
micio. I

XXXIX. 1 Suprimidas las defensas de la orilla del
m ar,1 César, según quedó dicho arriba,2 dejó en Orico
tres cohortes, 3 con el objeto de resguardarlo y les enco­
mendó la vigilancia de tres navios de guerra de los que
había trasladado de Italia.4 El general Caninio coman­
daba dicha misión y plaza. 2 Éste retiró dichos navios
al puerto que se encuentra en la parte de atrás de la
ciudad, 5 y los amarró a tierra y, a la entrada del puerto
echó a pique una nave de carga y a ésta le agregó otra,
sobre la cual construyó una torre y, opuesta a la entrada
misma de la bahía, la llenó de soldados y les confió su
vigilancia para toda ocasión de emergencia.

XL. 1 Enterado de esto, Cneo Pompeyo el hijo, que
comandaba la flota egipcia, se llegó hasta Orico; mediante
un remolque y jalándola con muchas sogas, sacó la nave
sumergida y al otro barco que había sido colocado por
Acilio1 para la vigilancia, lo rodeó de muchas naves,
en las que había levantado torres al mismo nivel, de manera
que, luchando desde un sitio más alto, y sustituyendo
constantemente a sus soldados cansados con otros íntegros
y tratando de tomar sus murallas en los restantes puntos
a la vez desde tierra, mediante escalas, y desde la propia
flota, para dividir las tropas de sus adversarios, logró
abordarlo y vencer a los nuestros, con grande esfuerzo
y gran cantidad de proyectiles, dejando de lado a sus
defensores que, sustrayéndose a la catástrofe, huyeron en
chalupas. 2 Al mismo tiempo se apoderó, por la otra

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