Page 147 - Las enseñanzas secretas de todos los tiempos
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hallada en las piedras interiores de la pirámide demuestra que la construcción estuvo

  sumergida en algún momento se debilita por el hecho científico de que aquel tipo de
  piedra  sufre  exudaciones  de  sal.  Si  bien  es  posible  que  el  edificio  haya  estado

  sumergido,  al  menos  en  parte,  durante  los  miles  de  años  transcurridos  desde  su

  construcción, la prueba que se aduce para demostrarlo no es decisiva.

       La Gran Pirámide está construida en su totalidad de caliza y granito y los dos tipos
  de piedra se combinan de una manera peculiar y significativa. Las piedras se nivelaron

  con la máxima precisión y el cemento utilizado era de una calidad tan excepcional que

  en  la  actualidad  es  prácticamente  tan  duro  como  la  piedra  misma.  Los  bloques  de

  caliza se cortaron con sierras de bronce que tenían dientes de diamante o de alguna
  otra  piedra  preciosa.  Las  esquirlas  de  las  piedras  se  amontonaron  contra  la  cara

  septentrional de la meseta sobre la cual se levanta la construcción, donde constituyen

  un  contrafuerte  más  para  sostener  su  peso.  Toda  la  pirámide  es  un  ejemplo  de
  orientación  perfecta  y  realmente  es  la  cuadratura  del  círculo.  Esto  se  consigue

  lanzando una línea vertical desde el vértice de la pirámide hasta su base. Si esta línea

  vertical se considera el radio de un círculo imaginario, la longitud de la circunferencia
  de dicho círculo será igual a la suma de las bases de los cuatro lados de la pirámide.

       Si el pasillo que conduce a la cámara del rey y la cámara de la reina quedó sellado

  miles de años antes de la era cristiana, quienes fueron admitidos posteriormente en los

  Misterios de las pirámides debieron de recibir su iniciación en galerías subterráneas
  que ahora desconocemos. Sin tales galerías, no podría haber habido ningún medio de

  acceso ni de salida, puesto que la única entrada superficial estaba totalmente cerrada

  con las piedras del revestimiento. Si no está bloqueada por la masa de la Esfinge ni

  oculta en alguna parte de aquella imagen, la entrada secreta puede estar en alguno de
  los templos adyacentes o en los lados de la meseta de caliza.

       Concentrémonos  en  los  tapones  de  granito  que  ocupaban  el  pasillo  que  subía

  hacia la cámara de la reina y que el califa Al-Mamun prácticamente se vio obligado a
  pulverizar para poder despejar el camino hacia las cámaras superiores C. Piazzi Smyth

  señala que la posición de las piedras demuestra que fueron colocadas allí desde arriba,

  con lo cual gran cantidad de obreros tuvieron que salir desde las cámaras superiores.

  ¿Cómo  lo  consiguieron?  Smyth  cree  que  descendían  a  través  del  muro  (véase  el
  diagrama) y dejaban caer tras ellos la piedra inclinada hasta el sitio correspondiente.

  Sostiene también que es probable que los ladrones utilizaran el pozo para entrar en las

  cámaras superiores. Como la piedra inclinada estaba puesta en una capa de yeso, los

  ladrones  se  vieron  obligados  a  atravesarla  y  dejaron  una  abertura  irregular.  Sin
  embargo, Dupré, un arquitecto que ha dedicado años a investigar las pirámides, no
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