Page 132 - Comentarios_reales_1_Inca_Garcilaso_de_la_Vega
P. 132
supremos. Había cuatro visorreyes, de cada distrito el suyo: eran presidentes
de los consejos de su distrito; recibían en suma la razón de todo lo que
pasaba en el reino, para dar cuenta de ello al Inca; eran inmediatos a él y
supremos gobernadores de sus distritos. Habían de ser Incas legítimos en
sangre, experimentados en paz y en guerra. Estos cuatro, y no más, eran del
consejo de estado, a los cuales daba el Inca orden de lo que se había de hacer
en paz o en guerra, y ellos a sus ministros de grado en grado, hasta los
últimos. Y esto baste por ahora de las leyes y gobiernos de los Incas. Ade-
lante, en el discurso de sus vidas y hechos, iremos entretejiendo las cosas
que hubiese más notables.
CAPITULO XVI
LA VIDA Y HECHOS DE SINCHI ROCA, SEGUNDO REY
DE LOS INCAS
A MANCO CÁPAC Inca sucedió su hijo Sinchi Roca: el nombre propio
fue Roca {con 1a pronunciación de r sencilla); en la lengua general del
Perú no tiene significación de cosa alguna; en la particular de los Incas la
tendrá, aunque yo no la sé. El Padre Blas Valera dice que Roca significa
Príncipe prudente y maduro, mas no dice en qué lengua; advierte la pro-
nunciación blanda de la r, también como nosotros. Dkelo contando las excelen-
cias de Inca Roca, que adelante veremos, Sinchi es adjetivo: quiere decir
valiente, porque dicen que fue de valeroso ánimo y de muchas fuerzas, aunque
no las ejercitó en la guerra, que no la tuvo con nadie. Mas en luchar, correr
y saltar, tirar una pielra y una lanza, y en cualquiera otro ejercicio de fuerzas,
ha~ la ventaja a todos los de su tiempo.
Este Príncipe, habiendo cumplido con la solemnidad de las exequias
de su padr_e y tomado la corona de su reino, que era la borla colorada, pro-
puso de aumentar su señorío, para lo cual hizo llamamiento de los más
principales curacas que su padre le dejó, y a todos juntos les hiro una plá-
tica larga y solemne, y entre otras cosas les dijo que en cumplimiento de lo
que su padre, cuando se quiso volver al cielo, le dejó mandado, que era la
conversión de los indios al conocimiento y adoración del Sol, tenía pro-
puesto de salir a convocar las naciones comarcanas; que les mandaba
y encargaba tomasen el mismo cuidado, pues teniendo el nombre Inca como
su propio Rey, tenían la misma obligaóón de acudir al servicio del Sol,
padre· común de todos ellos, y al provecho y beneficio de sus comarcanos,
que tanta necesidad tenían de que los sacasen de las bestialidades y torpezas
93