Page 203 - El Islam cristianizado : estudio del "sufismo" a través de las obras de Abenarabi de Murcia
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192 Parte II. — Doctrina espiritual de Abcnarabi
dio de un silencio sepulcral, roto tan sólo por el eco monótono de ple-
garias breves, isócronamente reiteradas, consagrábase a la contem-
plación (1).
El islam conoció desde muy pronto un ejercicio de devoción volun-
taria, practicado por el común de los fieles, que se parece bastante a
esta soledad monástica. Se llama iticaf o retiro espiritual. Tradiciones
más o menos auténticas circularon, a guisa de testimonios, que acre-
ditaban su origen revelado, como práctica introducida por el mismo
Mahoma; pero el texto alcoránico no lo recomienda o aconseja en
términos explícitos ni con alusiones que fundadamente autoricen la
pretendida paternidad mahometana. El método ritual de su ejercicio
pasó, no obstante, a los manuales de derecho canónico, al lado y como
apéndice de dos preceptos litúrgicos (ayuno y oración), a causa, sin
duda, de¡ que está constituido, como vamos a ver, de una combinación
de ambos.
En todo tiempo del año, más meritoriamente en la decena final del
mes de ramadán, consagrado a la penitencia y al ayuno, cualquier sim-
ple fiel de los que viven en el siglo se resuelve, a veces con voto religio-
so, a abandonar su casa, familia y negocios, para recluirse durante uno,
tres o diez días en una mezquita, a fin de dedicarse en el retiro más hol-
gadamente a una vida devota que esencialmente consiste, aparte de la
intención general de servir a Dios, en guardar castidad perfecta, aisla-
miento absoluto y el ayuno ritual muslímico, que, como es sabido, veda
toda comida y bebida mientras el sol está en el horizonte. Añádense a
estos actos de privación o mortificación—negativos— , otros positivos
de lectura alcoránica, oración y meditación (2).
El iticaf o retiro espiritual ofrecía, pues, a los seglares ocasión pro-
picia para imitar temporalmente la vida religiosa de los devotos que
vivían apartados del mundo. Es, por lo tanto, en el islam, una imita-
(1) Cfr. Besse, 36-43; 323; Pourrat, I, 160, 434.
(2) Este método se puntualiza, en forma muy parecida a la que damos
aquí en resumen, por todos los manuales de derecho islámico. Cfr. Sommario
del diritto malechita di Halil ibn lshaq (trad. Guidi) I, 227. Milano, Hoepli,
1919. Item Averroes, Badaya, 184-187.