Page 209 - El Islam cristianizado : estudio del "sufismo" a través de las obras de Abenarabi de Murcia
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CAPÍTULO IX —
LOS ESTADOS, LAS MORADAS Y LOS CARISMAS
En qué difieren y coinciden los estados y las moradas.—Su esencia común y
su causa.—Teoría de las moradas, según Abenarabi y sus precursores islá-
micos.—Abolengo cristiano de esta teoría.—El milagro y el carisma en la teo-
logía islámica.—Doctrina de Abenarabi.—Carismas exteriores e interiores o es-
pirituales.—Teoría de Abenarabi sobre la esencia, causas ocasional y fi-
nal y frutos del carisma.—Explicación naturalista de su mecanismo.—Expli-
cación mística.—Armónica relación entre las virtudes y los carismas.—Clasi-
ficación de éstos basada en dicha armonía: carismas de visión, audición, elo-
cución, manipulación, sobriedad, castidad y deambulación.—Carismas del co-
razón.—Carismas mixtos.—El voto carismático de la muerte de la voluntad.
Los carismas y la perfección: actitud de Abenarabi, comparada con la de los
alumbrados y la de los místicos de la Iglesia católica.—Los carismas no son
la perfección.—Los carismas como tentación o prueba.—La renuncia de los
carismas.—Coincidencia de Abenarabi con la escuela carmelitana en esta ac-
titud.— Abolengo cristiano de toda la doctrina carismática.
El método ascético, ayudado de los diferentes medios o instrumen-
tos de perfección que acabamos de estudiar, conduce al alma gradual-
mente a la meta a que aspira (1). El proceso o mecanismo de esta
marcha gradual hacia la perfección en la vida ascética y mística es
analizado por Abenarabi en su Mawaqui con singular solicitud (2).
Parte del axioma teológico de la necesidad de la gracia, como origen
(1) Cfr. supra, V y VI.
(2) Mawaqui, 52, 94, 133, 145, 166. Cfr. Tohfa, 16; Fotuhat, II, 505-507.