Page 90 - MITOS GRIEGOS e historiografía antigua
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     Cirene (como sospecho) y que Sarpedón sea una isla del entorno del
     Estrecho, prácticamente inubicable. Puede proponerse la hipótesis que
     ese Ojo, ese amigo o aliado de la gente indígena podrían ser los fenicios
     si lo encuadramos dentro del juego de intereses y relaciones que éstos
     mantenían con los pueblos.88 C. González Wagner ha argumentado89 la
     importancia que tenía el comercio fenicio para sostener el poder real de
     las monarquías locales indígenas, creando hábitos de dependencia de
     productos  exóticos  procedentes  del  comercio  fenicio  que  ellos
     redistribuían como élite social y signo de poder. Esa regularidad de los
     intercambios cobra sentido pleno con los siguientes párrafos del texto:
     «le dice que no tiene nada digno de tomarse aparte de la Gorgona, y le
     indica su cantidad de oro», posiblemente sea una referencia a la canti­
     dad de oro que tenía la estatua de Gorgona-Atenea, dando a entender
     que aquella imagen era un botín suculento, lo suficiente como para
     apartar la atención de las mercancías que esos comerciantes llevaban.
     Pero cuando las jóvenes veían que el suministro no llegaba «según lo
     acordado» (lin. 43), se extrañaron, «se preguntaban qué ocurría» (lin.
     45), y sospechaban una de otra, porque había privación.
        «En esto navega hacia ellas Perseo, encontrándolas juntas» (lin. 47-
     48). A cambio de algo robado (el Ojo), Perseo exige a aquéllas la infor­
     mación acerca de dónde está la Gorgona, el tesoro, amenazándolas «con
     la muerte» (lin.  50). De nuevo se nos presenta aquí una acción anti­
     heroica, totalmente desacralizada y teñida de los más ruines comporta­
     mientos humanos como son el engaño y la extorsión. Por un evidente
     conflicto de intereses dos de las gorgonas (entiéndase siempre por ex­
     tensión islas, poblaciones, etc.) le declaran dónde está el tesoro; y la
      otra, Medusa, paga su silencio con la muerte (lin. 52-53). En la leyenda
     tradicional Medusa y  Gorgona son la misma.  Sólo en este texto de
      Paléfato se separan y delimitan las funciones, y cuando el mitógrafo se
     refiere que a Gorgona «la despedazó» (lin. 49), no hace sino materiali­
      zar en algo físico (el metal; el oro) la muerte simbólica de un personaje.
     No cabe duda de que era algo material, pues continúa diciendo que
      «llenó la nave» (lin.  49-50). Insisto una vez más en que el texto se
      mueve en un ámbito de relaciones comerciales primarias, de intercam­
     bio y distribución, y no propiamente de colonización o asentamientos

      88 M. Bendala, «Las más antiguas navegaciones», 36.
      89 C. González Wagner. «Aproximación al proceso histórico de Tartessos». AEspA. 56.1983.
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