Page 45 - Dialectica
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Las dial´ ecticas naturales

             donde uso aqu´ ı –como en el resto del libro– la notaci´ on de sustitucio-
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             nes habitual en la teor´ ıa de grupos. Esto quiere decir que la negaci´ on
             N transforma 0 en 1 y rec´ ıprocamente, yin en yang y rec´ ıprocamente.
                La afirmaci´ on original de Wilde adquiere en este contexto una gran
             precisi´ on l´ ogica y no puede ser considerada como una simple frase de
             ingenio. Aparte de las verdades y falsedades universales que se aplican,
             por ejemplo, a la matem´ atica, a la ciencia o a la t´ ecnica, las afirmacio-
             nes acerca del arte tiene otra suerte. Excepto el caso de afirmaciones que
             pueden ser trivialmente verdaderas o falsas, todas las dem´ as afirmacio-
             nes posee un valor l´ ogico diferente. El enunciado de Wilde citado se
             puede reformular en t´ erminos precisos como:

                  Toda afirmaci´ on no trivial sobre el arte posee valor l´ ogico
                  yin o yang y de all´ ı que la negaci´ on de toda afirmaci´ on, sea
                  una afirmaci´ on igualmente v´ alida.

                En lo expuesto, se entiende que los valores l´ ogicos yin y yang son
             valores que indican verdad y no falsedad, si bien puede ser una ver-
             dad parcial o limitada. Como ´ este es el primer ejemplo de afirmaci´ on
             que no toma los valores l´ ogicos tradicionales, se justifica abundar en el
             punto. A titulo de ejemplo consideremos las dos afirmaciones:


                  el arte refleja la realidad,
                  el arte crea una realidad nueva.

             La mayor´ ıa de las personas estar´ an de acuerdo con las siguientes afir-
             maciones:

                  Estas afirmaciones son –en alg´ un sentido– contrarias.
                  Estas afirmaciones no son –en forma absoluta– ni universalmen-
                  te verdaderas ni universalmente falsas; en todo caso no es sencillo
                  establecer claramente su valor l´ ogico.
                  La primera afirmaci´ on posee un tono materialista y la segunda
                  un tono idealista.
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              Esta notaci´ on de describe m´ as adelante, ver p´ agina 109.
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