Page 181 - El judío internacional
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inquilinos, instalando en ella a familias negras. Aprovechaban así el antagonismo de razas para
desvalorizar el precio de las fincas de todo un barrio, y poderlo adquirir después a bajo precio. Tal
vez existan en Polonia condiciones parecidas, que hagan aparecer la venta de terrenos a israelitas
como traición contra la propia raza. "El antagonismo de razas" no ofrece, empero, suficiente
explicación de este fenómeno, sino que algo mas profundo rebullo en el problema.
Consistía el boicot en un mutuo acuerdo entre polacos de no vincularse comercialmente sino con
polacos. Los hebreos eran numerosos, ricos e influyentes en todos los ramos comerciales. En
realidad, aunque no formalmente, son propietarios de todos los solares de Varsovia. Este "boicot",
cuyo nombre de polaco es "cooperativa", lo transforman y desfiguran los hebreos, declarando que
son persecuciones.
Rumbold dice al respecto: "Es preciso recordar que los polacos, bajo la influencia de modificaciones
económicas y por el hecho de que desde 1832 no podían ocupar puesto públicos, tuvieron que
dedicarse por fuerza al comercio. A partir de este momento surgió cierta competencia entre la
población polaca y la hebrea en Polonia, competencia que se agudizo al permitir el gobierno ruso la
fundación en Polonia de cooperativas. Aumenta constantemente el movimiento cooperativo en
Polonia, y es indudable que esta llamado a constituir un factor prominente en el desarrollo
económico polaco, perjudicando indirectamente la preponderante posición del intermediario hebreo
en Polonia.
"Podría el gobierno polaco suprimir ese boicot mediante leyes y decretos. Pero debo llamar la
atención sobre el detalle de que esta fuera del alcance de un gobierno obligar a sus súbditos a
vincularse comercialmente con quien no quieran hacerlo".
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Morgen hau juzga también el asunto desde un punto de vista mas justo que su correligionario
británico, informando: "Numerosos comerciantes hebreos pretenden ver una forma de menosprecio
perjudicial en la fundación de comercios cooperativos. Es preciso reconocer en ellos un esfuerzo
legislativo para limitar la actuación excesiva y por lo consiguiente las cuantiosas ganancias de los
intermediarios. Por desgracia, se recomendaron dichos comercios al implantarse en Polonia, como
un medio adecuado para eliminar al traficante israelita.
Ese proceder indujo a los hebreos a la creencia de que la implantación de las cooperativas
constituía un ataque contra ellos. Aunque es posible que los sentimientos antisemitas hayan
representado cierto rol en ello, resulta, empero, que el sistema de cooperativas representa una
forma de actuación nacional-económica, cuya aplicación es completamente licita en toda
comunidad".
En efecto, no resulta muy difícil luego de conocidas las apreciaciones y juicios de estos cinco
personajes, formarse una idea exacta de la situación en Polonia. Ochocientos años hace que abrió
Polonia sus puertas a los hebreos perseguidos en toda Europa. Se congregaron allí, gozando de
amplísima libertad, pudiendo constituir un "Estado dentro del Estado", ya que en todas las
cuestiones hebreas poseían autonomía absoluta. Se relacionaban con el gobierno polaco solo por
intermedio de portavoces o representantes electos. Los polacos les fueron indulgentes, no
experimentando contra ellos prejuicios de índole religiosa, ni racial. Después, Europa cayó sobre
Polonia, destrozándola, hasta el extremo de no existir sobre Polonia sino en los corazones de sus
hijos. En esta época de humillación polaca lograron los judíos enorme poderío, dominando a los
nativos hasta que en sus hogares. Sobrevino la guerra mundial, y con ella la promesa de la
restitución y liberación de una Polonia independiente. Los hebreos no simpatizaron con esta
restitución, porque jamás fueron amigos de los polacos. Estos lo advirtieron perfectamente, y
cuando luego de firmado el Armisticio se vieron libres de manifestar abiertamente sus sentimientos,
así lo hicieron. Ocurrieron muchos acontecimientos deplorables, aunque no inexplicables, y de ahí
que los hebreos, según afirmación expresa de los polacos, lucharon contra el país que durante ocho
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