Page 11 - La Cocina del Diablo
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“La falta de vitamina A produce también deformaciones en el hocico, en los maxilares, las orejas,
         labios leporinos, cojos”.
         -      ¡Interesante, pero los puercos no son hombres!, grita el técnico.
                Morf contestó con impaciencia:
         -      No  hay  ninguna  razón  para  admitir  que  la  ausencia,  dentro  de  la  alimentación  humana,  de  un
         elemento biológico esencial, no produzca degeneraciones análogas.
                “El hombre moderno, en el seno de su pequeño universo mecanizado y estandarizado, tiende a creer
         que es independiente del resto de la naturaleza”.
         -      Yo soy de la opinión, también, que no se tiene derecho de extender al hombre los resultados de la
         experimentación sobre el animal, declaró Francoise.
         -      Si ello es así, ¿por qué entonces vuestros colegas martirizan y condenan a muerte, por la vivisección a
         millones de animales? preguntó Morf con un movimiento de humor.
                Francoise fingió no haber escuchado esta acusación.
         -      Dentro  de  la  experimentación  sobre  el  animal,  dijo  ella,  se  estudia  con  mayor  frecuencia  casos
         extremos,  por  ejemplo  la  privación  casi  total  o  total  de  un  principio  activo.  Se  buscan  resultados
         espectaculares. En la vida normal, dichos casos son raros.
         -      Le pido disculpas, señorita, pero las experiencias han probado que es suficiente una carencia mínima
         en el curso del desarrollo del ser viviente, para provocar graves problemas degenerativos.
                Alfred no estaba convencido.
         -      ¿Podría Ud. citarme una prueba, tomada de la biología humana?
         -      Ciertamente. En Dinamarca, la coyuntura favorable del año 1916 lleva a los campesinos a exportar
         gran parte de los productos lácteos. En consecuencia, la población danesa tuvo una carencia de vitamina A,
         se  constata  entonces  una  rápida  extensión  de  problemas  oftálmicos.  Cuando  este  comercio  fue  prohibido,
         estas enfermedades desaparecieron en pocas semanas.
                “En  los  machos,  la  carencia  de  vitamina  A,  causa  la  esterilidad.  Se  tomó  a  un  perro  basset,  con
         antecedentes sanos. Se le privó de minerales y de principios activos. Después se le llevó a aparearse con 4
         perras. Todos los cachorros tuvieron el paladar deformado y graves malformaciones de la columna vertebral.
         Se  pudo  constatar  sin  dudas  que  la  enfermedad  de  carencia  había  sido  transmitida  por  el  patrimonio
         hereditario del padre”.
                Morf agrega insistiendo con fuerza:
         -      El valor biológico de un alimento es un misterio que escapa a las investigaciones de la ciencia. Es
         como el problema del origen de la vida. Las substancias activas, vitales son de una multiplicidad infinita, de
         una complejidad que desafía todo análisis. Es imposible utilizarlas artificialmente y aún más recomponerlas.
         En consecuencia, no se puede remediar la avitaminosis administrando lo que se llaman vitaminas sintéticas.
                El técnico objetó.
         -      Las avitaminosis tales como el escorbuto, la pelagra y el beri-beri, son conocidos después de mucho
         tiempo y no se presenta ya ningún problema.
         -      ¡Exactamente!  respondió  Morf.  Sus  síntomas  son  lo  suficientemente  claros  y  violentos  como  para
         llamar  el  médico.  Este  los  puede  diagnosticar  y  sanar.  Pero  al  lado  de  estas  enfermedades  palpables,  he
         introducido otras más peligrosas, que se incuban, que se arrastran, que debilitan la salud sin que uno se de
         cuenta, como la gota de agua que cae constantemente sobre la roca.
         -      Es  arbitrario  e  irrazonable  hacer  absorber  al  hombre  substancias  químicas,  este  uso  se  basa  en  la
         ignorancia  del  público  y  se  apoya  en  una  pseudos-ciencia,  incompleta  y  sobretodo  venal.  Tiene  sobre  el
         organismo humano los mismos efectos deplorables que el uso de abonos químicos en el suelo.
                “En nuestros grandes laboratorios químicos y farmacéuticos, nos preparamos un maravilloso porvenir.
         Es de allí de donde parten nuestras directivas en dirección de la pseudos ciencia y de la prensa”.
                “Nada  las  puede  hacer  salir  de  sus  sitios.  La  alimentación  influye  enormemente  sobre  la  vida  del
         hombre, en su alma, su carácter y su humor. Una alimentación defectuosa puede llevar a tensiones normales
         del alma y de la inteligencia”.



         La Cocina del Diablo – Gunther Schwab                                                                10
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