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Capítulo Ocho: El declive del Sabiondo | 241
240| En el Jardín de la Sabiduría Capítulo Siete: Cambio de rumbo | 225 Él respondió: “Esa es la verdad. No es una broma”. que era mejor que todos… y burlarse de ellos. Su única dicha en la vida era la fantasía de emuná, no hacía más que herir los sentimientos de los demás Por el contrario
es un precepto de la Torá. De la misma manera, hacemos todo se describe el enorme esfuerzo en que incurrieron nuestros Aunque el mensajero le hubiera dicho que había recibido
lo posible por recibir el Shabat temprano y por ayudar a la Sabios a fin de honrar a sus rabinos, maestros y padres. Y la carta directamente de manos del rey, el Sabiondo habría
persona que nos necesita con la mayor rapidez posible. Todos no sólo eso, sino que muchos de los más grandes tzadikim negado y ridiculizado esa respuesta también. Esta es la
estos preceptos constituyen la voluntad de Hashem, o sea, lo se esforzaron enormemente por honrar a personas que manifestación de lo que escribe el Rey David (Salmos 14:1): “El
que desea el “Rey”. aparentemente ocupaban un nivel muy inferior al de ellos, canalla dice en su corazón: ‘no hay Dios’”. Más adelante
ya sea a nivel social, espiritual o intelectual. ¿Y por qué? veremos que cuando el Simple, que a esta altura ya es un gran
Tal como vimos en el capítulo anterior, el Simple fue corriendo Porque cada alma es un poquito de Divinidad y nadie conoce ministro, le dijo al Sabiondo que él había visto al rey con sus
a cumplir con la voluntad del Rey, que es una alusión a la el verdadero valor de cada alma. Por eso, ellos se cuidaban propios ojos, el Sabiondo le insistió: “¿Y cómo sabes que él
persona de emuná pura y simple que va corriendo a cumplir mucho de respetar a cada persona. realmente es el rey?”.
con la voluntad de Hashem. Por el contrario, el Sabiondo dejó
al rey esperando… Vemos una vez más cómo su intelecto y Lo mismo ocurre con la Torá. El canalla niega la Torá, no
su ego tan inflado se le interponen en el camino, evitando porque la Torá no sea verdad sino porque la Torá prohíbe todo
que haga lo que debe hacer, como si una gruesa muralla lo La humildad es sabiduría aquello que el canalla desea. Y dado que la Torá no le permite
separara de la verdad. Por supuesto que uno no tiene que anularse a sí mismo ante al canalla tener lo que desea, él construye una ideología de
cada persona y ante cada opinión. Hay situaciones en la fantasía según la cual la Torá no es verdad, Dios no lo permita.
vida en las que tenemos que ser firmes como una roca, como Incluso si nos preguntamos el uno al otro si la Torá –“la carta
No hay que rehusarse por ejemplo, cuando nos negamos a realizar algo que está del Rey”– es verdad, ¿cómo sabemos que provino del Rey?
prohibido, incluso si ese acto forma parte de la norma de una
Nuestros Sabios nos enseñan que no debemos desacatar cierta sociedad. Siempre que la verdad sea clara, como en el La Torá ha sido transmitida de una generación a otra en
a una persona más “grande” que nosotros. O sea, no caso de un precepto de la Torá o en el caso de algo que hemos una cadena ininterrumpida de padre a hijo y de maestro a
debemos desacatar a toda persona que ocupa un cargo de estudiando en forma explícita con nuestro rabino o guía discípulo. Dicha cadena se remonta a hace ya 3.329 años (al
responsabilidad pública, ya sea el rabino del barrio, o nuestros espiritual, no debemos transigir. En el judaísmo, “adular” no momento de escribir este libro), cuando 600.000 hombres, sus
padres, o cualquier persona que sea más sabia o de mayor de es regalar elogios sino transigir en una situación en la que está mujeres, y sus hijos, fueron testigos oculares del descenso de
edad que nosotros. Y por supuesto, en esta categoría entra prohibido hacerlo. Hashem al Monte Sinaí para darnos la Torá. ¿Cómo podemos
también el rey. dudar del testimonio de más de dos millones de personas?
Escribe Rabí Najman (ibíd. II:22) que la adulación es la humildad
Si el Sabiondo hubiera tenido aunque sea una mínima medida mal utilizada. Por eso es muy importante que no hagamos Nuestros antepasados presenciaron no solamente la Torá
de humildad, él también habría ido de prisa a ver al rey. Es mal uso de ella. No debemos ser humildes ante la maldad o la siendo escrita frente a sus propios ojos sino también las Diez
verdad que él se consideraba mejor que todo el mundo, pero injusticia porque si no, vamos a estar “adulando” al mal o a la Plagas, la División del Mar Rojo, la tierra tragándose a Koraj
¿acaso era más importante que el mismísimo rey? El hecho de injusticia según el concepto judío de “adulación”. y todo su clan, y muchísimos milagros más. Durante cuarenta
no haber actuado en forma inmediata fue un acto de tremenda años, los israelitas comieron el maná, el pan enviado del Cielo,
insolencia. En lo que a la verdad se refiere, el verdadero líder es una y bebieron el agua de un pozo milagroso que los acompañaba
persona inflexible. Él sabe la verdad y por más presión que a lo largo del desierto, en un lugar de total desolación sin
Rabí Najman enfatiza la importancia de la humildad, le hagan no van a lograr que se aparte de ella. Su liderazgo
afirmando que cada individuo debe mostrarse humilde frente carece de todo rastro de arrogancia. El verdadero líder es una más que arena, piedras, serpientes y escorpiones. Hashem les
a aquellos que son más importantes que él, los que están a su persona humilde que sabe que fue designado por Hashem proveyó su sustento en forma milagrosa.
mismo nivel, los que están a un nivel inferior al suyo, y ante él como Su emisario. El verdadero líder se somete a la verdad Nuestros antepasados fueron testigos de todos estos milagros
mismo (Likutey Moharán I:14). pero se mantiene firme y resuelto frente a la maldad o la con sus propios ojos y transmitieron la tradición a las

El Talmud y el Midrash están llenos de historias en las que corrupción de cualquier forma que sea. generaciones siguientes, que también tuvieron su buena cuota