Page 69 - Auge y caída del antiguo Egipto
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las primeras ceremonias reales, eventos ricos en rituales que subrayan el papel
del rey como garante de prosperidad y estabilidad.
Otra cabeza de maza del mismo grupo registra una ceremonia distinta, aunque
de no menor resonancia. Esta vez el rey que la preside es Narmer, quien,
entronizado en un estrado elevado bajo un toldo, lleva la corona roja y el cetro
en forma de cayado. Junto al estrado se sitúa el acostumbrado par de portadores
de abanicos, acompañados del portador de sandalias y del principal ministro del
rey. Tras ellos hay unos hombres que llevan largos palos; incluso una monarquía
sacra requería seguridad. La ceremonia tiene además cierto tufillo militarista, ya
que su principal acto es el desfile del botín y los prisioneros enemigos
capturados ante el real trono. En una clara analogía, junto a la plaza de armas se
muestran tres antílopes cautivos dentro de un recinto vallado. El vínculo
ideológico entre la guerra y la caza, entre las fuerzas indómitas de la naturaleza y
los adversarios del rey, seguiría conservando su potencia a lo largo de toda la
historia egipcia.
Una reexaminación reciente de la antigua ciudad de Nejen, incluido el lugar
donde se descubrieron la paleta de Narmer y la cabeza de maza, ofrece una
nueva y sugerente perspectiva sobre las prácticas de los comienzos de la realeza.
El área identificada hasta ahora como un templo dedicado al dios halcón Horus
local puede que no fuera un templo en absoluto, sino un espacio reservado para
ceremonias reales. Según esta interpretación, el montículo del centro del recinto
vallado pudo haber sido un estrado elevado para las apariciones oficiales del rey,
y el terreno abierto frente al montículo podría haber sido utilizado para rituales
tales como desfiles de prisioneros. De ser así, es posible que la cabeza de maza
de Narmer retrate la escena real de tal acto. Sin duda, los objetos encontrados en
Nejen parecen reflejar un culto a la monarquía. En varios marfiles decorados del
«Depósito Principal» se representan grandes cabezas de maza erigidas sobre
postes en un cercado, de modo que quizá las cabezas de maza de Narmer y
Escorpión fueron utilizadas originariamente para identificar y delimitar un
espacio regio. Si aparte de Nejen nos fijamos en el resto de Egipto, veremos que