Page 75 - Auge y caída del antiguo Egipto
P. 75
3
Poder absoluto
ECONOMÍA DIRIGIDA
La ideología nunca es suficiente por sí sola para garantizar el poder. Si pretende
tener éxito a largo plazo, todo régimen debe ejercer también un control
económico efectivo para reforzar sus pretensiones de legitimidad. Los gobiernos
tratan de manipular el sustento además de la vida. El desarrollo de una auténtica
administración nacional en el antiguo Egipto fue uno de los principales logros
del período de las tres primeras dinastías, la fase de formación de la civilización
faraónica —de unos cuatrocientos años de duración— conocida como Período
Dinástico Temprano (2950-2575). A comienzos de este período el país acababa
de ser unificado. Narmer y sus sucesores inmediatos se enfrentaban al reto de
gobernar un vasto reino que se extendía a lo largo de ochocientos kilómetros
desde el corazón de África hasta las orillas del Mediterráneo. A finales del
período, el gobierno controlaba una economía dirigida de carácter centralizado,
financiando proyectos de construcciones reales a muy gran escala. El relato de
cómo se logró tal cosa es una historia de determinación, de innovación y, sobre
todo, de ambición.
Entre las grandes invenciones de la historia humana, la escritura merece un
lugar especial. Su capacidad de transformación —en la transmisión de
conocimientos, el ejercicio del poder y el registro de la propia historia— no
puede ponderarse lo bastante. Hoy resulta prácticamente imposible imaginar un
mundo sin comunicación escrita, y, para el antiguo Egipto, esta debió de
representar una auténtica revelación. No es probable que lleguemos a conocer