Page 72 - Alvar, J. & Blázquez, J. M.ª (eds.) - Héroes y antihéroes en la Antigüedad clásica
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mover la participación de los aristócratas en el sistema democrático,
como hacían los sofistas, sino por promover el acceso de los hoplitas
a los círculos aristocráticos. En la hetairía, los modos de transmisión
del conocimiento son los herederos del banquete antiguo, donde los
miembros de la aristocracia transmitían el conocimiento a los jóvenes
que se preparaban para la vida propia de los adultos, a los efebos, con
quienes sostenían relaciones de pedagogía y de pederastía, donde se
practica el simposio, creador de lazos de solidaridad que se vertían
normalmente en la vida política. Por eso los personajes del círculo so
crático prefieren normalmente hablar en círculos restringidos, y no en
las asambleas, y el mismo sistema socrático, base del diálogo platóni
co, basa su eficacia en un modo de transmisión del conocimiento que
sólo es posible en los círculos restringidos que se identifican con la he
tairía. Así se explica también la doble perspectiva que ofrece el Prota
goras platónico, entre los discursos de los sofistas y los diálogos im
puestos por Sócrates, a través del sistema de preguntas y respuestas, al
ternativa que sirve para poner de relieve la diferencia de ideas existente
entre uno y otro modo de manifestación intelectual17.
En el plano intelectual, Protágoras y los sofistas fueron sin duda
los héroes de la democracia y Sócrates el antihéroe, preocupado más
bien por articular una solidaridad que en principio podía aparecer
como incomprensible y objeto de crítica, entre otras cosas porque
corría el riesgo poner en peligro la democracia. Las vicisitudes históri
cas y la conformación de la tradición filosófica dio lugar a una visión
en que Sócrates se ha convertido en una especie de héroe y santo,
mártir de la incomprensión del pueblo ante los intelectuales, mientras
que los sofistas quedan relegados como antihéroes, representantes de
la frivolidad intelectual, sólo preocupados por ganar dinero y obtener
un éxito fácil a través de la persuasión engañosa. Es posible que en el
campo de la filosofía la batalla esté perdida18, pero, en el plano de la
historia de las ideas y de los comportamientos políticos, cada vez re
sulta más claro que los héroes de la democracia son, sometidos sin
duda a las transformaciones de la historia, los sofistas.
17 Ibid., «Plato, a Source for the Knowledge of the Relationship between Socrates
and Protagoras», en K. J. Boudouris, The Phihsophy o f Socrates, Atenas, International
Center for Greek Philosophy and Culture, 1991, ΪΎΙ-Τ1Ί.
18 B. Cassin, «Du faux ou du mensonge á la fiction (depseudos áplasma)», en B. Cas-
sin etatii, Leplaisirdeparler. Etudes sophistiques comparées, Paris, Editions de Minuit, 1986,
3-29.
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