Page 93 - Mediavilla-C-Caligrafia
P. 93

Lascaux, Altamira: la escritura rupestre
                                                 Cerca de trenta mil años antes ele nuestra era unos hombres decidieron cubrir las
                                                 paredes de sus cuevas con imágenes ele caza. ¿Acaso no fue ésta la primera tentación
                                                 hacia lo escrito? lascaux y Altamira son nombres que desde antes de la historia
                                                 evocan innegablemente los principios de la representación, de la  reproducción de lo
                                                 real. ¿Se trataba de rememorar los buenos tiempos de caza o, de un modo más sutil,
                                                 de conquistar por la imagen ciertas presas inaccesibles? Nadie lo sabe y tal vez nadie
                                                 llegue a saberlo jamás, pero lo cierto es que existieron hombres que querían
                                                 expresarse y ésta es, sin duda, la  mayor revolución del espíritu prehistórico que
                                                 hasta ahora hayamos podido constatar. Así pues, ya fuera para hacerse dueño
          Mano empuñ;:mdo un bifaz ad1rlirnse    del universo o para otros fines, representar, testimoniar, significó pintar: el arte
          elaborado mediante una técnica muy
                                                 de la  figuración  fue pues, en sus orígenes, el primer medio para memorizar un
          rudimentaria,
                                                 mensaje. En Francia, las innumerables cuevas de la  Alta Dordoña, con sus renos y
                                                 sus mamuts, da11  buena fe de elJo. Estos frescos rupestres de significado incierto
                                                 inaugpraron todo el  proceso de la escritura: el soporte (aquí la piedra misma), los
                                                 utensilios (como la madera quemada o la grasa animal), las estructuras del  lenguaje;
          Caz<~dor con arco procedentf' de la cueva de   todas las soluciones propuestas por el arte rupestre prehistórico prefiguran las que
          Alpera, Albacete (España). P<'riotlo me~ulíti<:u.
                                                 vendrían después según los diferentes tipos de escritura. La  historia de la escritura
          Figura en mjo y negro; altura: 17,5 cm.
                                                 es también la  historia Je las condiciones de su aparición. Salvando el elemento
          Representación muy esquemático que parece
          alejarse del contexto  rná15ico  y "P'Int<l  hacia la   técnico propiamente dicho, la representación rupestre de las cuevas prehistóricas se
          pictngraffa y la  escritura.           basa fundamentalmente en el realismo de la imagen. Con sus trazos y colores lisos,
                                                 la pintura rupestre magnifica la realidad en la medida en que exalta la vida concreta,
                                                 sobre todo la vida animal. Este arte figurativo en el que, como dice Élie Faure, «el
                                                 objeto» se proyecta «sobre ttna  pared», tardó en aparecer de nuevo: esta forma de
                                                 escritma del  mundo debió de interrumpirse aJ  final  del  Magdaleniense, en la cúspide
                                                 del Paleolítico superior. En  la época de las ciudades lacustres el  silencio volvió
                                                 a tomar posesión, al tiempo que enmudeció la arquitectura celta.  Los  primeros
                                                 momentos ele  la escritura humana no duraron pues  mucho tiempo. Como aterida
                                                 por un misterioso respeto, parece como si se hubierH encarnado en el impulso
                                                 de monolitos extraños. Tuvieron que transcurrir treinta mil años antes de que se
                                                 descubriera otra forma de lenguaje, pero esta vez sucedió muy lejos de la cornisa del
                                                 Atlántko ...























                                                 GuiJarros con rnonvos abstractos pimaclos cnn una mezcla de óxido de hierro rojo,  resina y grasa
                                                 animal, procedentes de la cueva de Mas d 'Azil, Aricge (Francia). Período mesolítico. Seglin  Edouard
                                                 l'ietle ( 1887), es los guijarros pudieron servir como moneda de cambio. Los Ira bajos  recientes de
                                                 Hugo Obermeier demuestran que estos objetos eran portadores de las almas de los difuntos. Es muy
                                                 significativo observar que las primeras expresiones artísticas no siempre fueron figurativas sino que,
                                                 por el contrario, a  menudo primaba la d imensión abstracta.





                                                    LOS  ORlC:ENES  I)E  LA  CA LIGI\AFI I\
   88   89   90   91   92   93   94   95   96   97   98