Page 29 - Extraña simiente
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—Me dijo que te conocía —repitió Rachel—. Y, además, no es más que
un pobre viejo inofensivo. Nos trajo un poco de leña… Gracias a eso he
podido encender el fogón. Me enseñó cómo se hacía.
—Me gustaría que entendieras que no puede entrar ningún extraño cuando
yo no estoy en casa. Viviendo en Nueva York, podrías haber aprendido la
lección. ¿Cómo sabes que ese hombre no es el que ha hecho todo esto?…
Señaló lentamente las paredes de la casa.
—¿Cómo sabes que no ha sido él?
—No lo sé, Paul, pero me parece que enjuicio bastante bien a las
personas…
—Simplemente prométeme que no vas a dejar entrar a nadie en la casa
cuando yo no esté.
Ella suspiró.
—Lo prometo…
—Está bien —hubo un silencio—. ¿Y este hombre se quedó mucho
tiempo? —parecía que Paul estaba tratando de disculparse.
—No —dijo Rachel al cabo de un instante—. No, el tiempo de meter la
leña, de charlar un rato, y en seguida se marchó. De verdad, Paul, es un
hombre inofensivo. Tiene el pelo blanco, muy espeso, parece un Moisés
consumido…, bueno, no es que esté consumido, sino que es muy delgado…,
alambicado. Vive en una cabaña en el bosque —hizo un gesto con la cabeza
señalando la pared oeste de la habitación—. Dice que lleva casi veinte años
viviendo allí. Al parecer, conocía muy bien a tu padre.
—¡Oh!… —se limitó a decir Paul…
—Sí. Me habló muy bien de él, dijo que era una pena que hubiera muerto
tan joven.
—A los treinta y seis años —añadió Paul.
—¡Tan joven, Paul! No lo sabía…
Paul esbozó una sonrisa y se cogió las rodillas.
—Algún día te contaré cómo transcurrió mi última semana aquí, después
de la muerte de mi padre… Es un buen tema para después de la cena…
—Sí, me encantaría —Rachel le miró expectante—. Lo siento —añadió
—, no quería ser desagradable. Pero nunca me cuentas nada de esa época de
tu vida. Debe ser… —se esforzó en encontrar la palabra exacta—. Te debe
doler recordar ese momento.
—No —contestó—, no es que me duela…
Le hubiera gustado decir que le resultaba confuso, pero eso le obligaría a
tener que explicarse y no estaba preparado para ello.
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