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Naturalismo e impresionismo
trabajadores después de la revolución de 1905- que la idea de que
las causas de su miseria están no en ellos mismos, sino en las con
diciones exteriores.» La pasividad de Tolstói frente a la realidad ex
terior corresponde al pacifismo de la clase señorial harta, y expre
sa, con su moralismo gruñón, autoacusador y atormentador de sí
mismo, una actitud completamente extraña al pensar y sentir del
pueblo.
Tolstói puede ser encuadrado tan difícilmente como Dos
toievski en una categoría política demasiado estrecha. Es un obser
vador insobornable de la realidad social, un despierto amigo de la
verdad y de la justicia y un crítico implacable del capitalismo, si
bien juzga las imperfecciones y pecados de la sociedad moderna
única y exclusivamente desde el punto de vista de los campesinos
y de la agricultura. Mas, por otro lado, desconoce las verdaderas
causas de la mala situación y predica una moral que pot adelanta
do significa la renuncia a toda actividad políticalM. Tolstói no sólo
no es un revolucionario, sino que es un enemigo declarado de toda
actitud revolucionaria. Lo que le diferencia de los portavoces del
«orden» y de la paz social en Occidente, de los Balzac, Flaubert y
Goncourt, es que todavía comprende menos el terror del gobierno
que el de los revolucionarios. El asesinato de Alejandro II le deja
completamente tranquilo, pero ante la ejecución de los autores del
atentado reacciona con una protesta185. Tolstói representa, a pesar
de sus prejuicios y errores, una tremenda fuerza revolucionaria. Su
lucha contra las mentiras del Estado policíaco y de la Iglesia, su en
tusiasmo por la comunidad de los campesinos y el ejemplo de su
propia vida pertenecen, fuesen cuales fueren los motivos íntimos
de su «conversión» y de su huida final, a los fermentos que des
truyeron la antigua sociedad y provocaron no sólo la Revolución
rusa, sino el movimiento revolucionario anticapitalista en toda Eu
ropa. En Tolstói se puede hablar realmente no sólo de un «triunfo
del realismo», sino a la vez de un «triunfo del socialismo», no sólo
de la descripción sin prejuicios de la sociedad por un aristócrata,
134 N . Lenin, L N. Tolstoi (1910). En N . Lenin-G. Piechanow, L. N, Tolstoi im
Spiegel cks Marxismus, 1928, págs. 42-44.
^ D. S. Mirsky» Contemp. Russ. Lit., pág. 8.
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