Page 40 - Matilda
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El hombre rubio platino
M ATILDA no tenía la más mínima duda de que esta última infamia de su
padre se merecía un severo castigo, así que mientras comía su horrible
pescado con patatas fritas, su cerebro barajaba diversas posibilidades. A la hora
de irse a la cama ya había tomado una decisión.
A la mañana siguiente se levantó temprano, fue al cuarto de baño y cerró la
puerta. Como ya sabemos, la señora Wormwood llevaba el pelo teñido de un
color rubio platino resplandeciente, muy parecido al reluciente color plateado de
las mallas de una equilibrista de circo. Se teñía el pelo dos veces al año en la
peluquería, pero la señora Wormwood lo cuidaba, aclarándolo en el lavabo más o
menos todos los meses con un producto llamado TINTE RUBIO PLATINO
EXTRAFUERTE PARA EL CABELLO. También le servía aquel producto para
teñir las molestas raíces de color castaño. El frasco de TINTE RUBIO PLATINO
EXTRAFUERTE PARA EL CABELLO se guardaba en el armarito del cuarto de
baño y en la etiqueta, debajo del nombre, se leía « Precaución: peróxido.
Manténgase fuera del alcance de los niños» . Matilda lo había leído maravillada
muchas veces.
El padre de Matilda tenía una espléndida cabellera negra, que peinaba con