Page 72 - 26 Fermi
P. 72

Se observó que la desintegración a  ocurría habitualmente en
                    núcleos de número atómico mayor que Z = 82.
                        Rutherford había utilizado las partículas a  para demostrar
                    la existencia del núcleo atómico. La energía de la desintegración
                    era conocida y se podía escribir en términos de las masas de los
                    núcleos involucrados en la reacción nuclear, aplicando la fórmula
                    de Einstein de la equivalencia masa-energía (E=mc ).  No  obs-
                                                                      2
                    tante, la inestabilidad estructural del núcleo que daba lugar a la
                    desintegración a, así como el motivo por el que la partícula a  era
                    exactamente un núcleo He: y no otro, no fueron resueltos hasta
                    que en 1928 el físico  ucraniano George Gamow (1904-1968) lo
                    explicó en el marco de la mecánica cuántica.
                        El  origen de  la radiación ~'  que  consistía simplemente en
                    electrones, todavía era un misterio. Antes del descubrinúento de
                    Chadwick del neutrón, se creía que los electrones del núcleo eran
                    los causantes de la radiación ~: eran necesarios para compensar el
                    exceso de carga que provocaban los protones del núcleo en aquel
                    modelo atómico erróneo que no contaba con los neutrones. Fermi
                    ya sabía que el modelo no funcionaba antes del descubrimiento
                    de Chadwick. Pero lo más extraño en la desintegración ~ era que
                    los electrones emitidos no tenían toda la energía que deberían,
                    no seguían el espectro energético esperado. Bohr llegó a soste-
                    ner que quizá se violaba localmente el principio de conservación
                    de la energía en la desintegración ~' cumpliéndose solo de fom1a
                    estadística, global.
                        En este entorno, en una famosa carta escrita el 4 de diciembre
                    de 1930, Pauli propuso que había una nueva partícula neutra, que
                    se emitía en la reacción pero que no era detectada. Fermi utilizó
                    su influencia en la Academia de Italia para organizar rápidamente
                    junto con Corbino una conferencia en Roma en octubre de 1931.
                    Allí Pauli,  en una conversación privada con Fermi y los demás
                    ragazzi de Via Panispema, avanzó la hipótesis de la existencia
                    de una pequeña partícula, «neutra, ligera y muy penetrante, que
                    mantenga el principio de conservación de la energía en la desinte-
                    gración beta». Fermi ya sospechaba de la existencia de dicha par-
                    tícula, pero no se atrevió a publicarlo por la oposición de Bohr al
                    respecto. Pauli había sido más osado e hizo pública su hipótesis.





         72         LOS  NEUTRINOS Y LA DESINTEGRACIÓN BETA
   67   68   69   70   71   72   73   74   75   76   77