Page 135 - Edición final para libro digital

CAPÍTULO 15.

—Buenas tardes. Vengo a visitar a los reos Nabil y Sabil Hasbúm.
—¿Es usted familiar?
—No, soy su abogado.
—Su nombre, por favor —le solicitó el guardia.
—Me llamo David Kachka —le dijo el padre de Ariel al funcio-
nario de la entrada, mientras que le mostraba su documentación.
El hombre que custodiaba la barrera que daba acceso al recinto
penitenciario, comprobó la veracidad del documento que le facili-
taba el abogado.
—Espere aquí —le respondió devolviéndole la credencial, y dan-
do media vuelta para dirigirse a una garita ocupada por otro guardia
de rango superior.
—Señor Sutlam, un tal David Kachka, que dice ser el abogado
de los hermanos Hasbúm, desea ver a los reos.
—¿Ha comprobado su identidad?
—Desde luego señor. Todo está en orden.
—Bien, cumpla con el protocolo de seguridad y envíelo al super-
visor de control interno.
—El subalterno encargado del control se acercó a David Kachka.
—Perdone señor, pero antes de dejarle pasar debo registrar su
coche. Son las normas.

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